Un equipo de investigadores mexicanos ha evidenciado que el jugo de granada en organismos con dietas altas en grasas puede mejorar los niveles de algunas enfermedades relacionadas con la obesidad como las enfermedades cardiacas.
Los investigadores administraron jugo de granada a ratones de laboratorio que habían sido sometidos a una dieta alta en calorías para inducir la obesidad. Después revisaron sus marcadores fisiológicos relacionados con la obesidad y otras afecciones relacionadas con el corazón de los roedores, incluyendo los niveles de colesterol, la presión arterial y la inflamación.
El estudio publicado en National Library of Medicine evidenció que los principales compuestos de la granada, las antocianinas y el ácido elágico, tienen efectos antiinflamatorios, hepatoprotectores y antioxidantes sobre la salud cardiovascular.
El jugo logró reducir en los roedores la concentración de colesterol malo, también conocido como LDL, en un 39%, también pudo aumentar la concentración de colesterol bueno, conocido como HLD, en un 27%. Según los investigadores, estos factores por sí solos reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares entre un 12% y un 18%.
Otra de las virtudes que descubrieron, es que el jugo reduce la presión arterial en un 24%, y también disminuyó los niveles de inflamación en los vasos sanguíneos.
Los investigadores creen que este experimento es un aporte a la comunidad científica para ahondar más en los beneficios de esta fruta y poder más adelante confirmar que el jugo de granada realmente reduce las enfermedades relacionadas con la obesidad en los humanos.