Ubicado en el noroeste de México, El Fuerte es un Pueblo Mágico que combina su rica historia colonial con una vibrante cultura indígena y una oferta gastronómica única. Con calles empedradas, edificios antiguos y una naturaleza impresionante, El Fuerte es un lugar ideal para quienes buscan una experiencia completa en un solo destino.
El Fuerte, fundado en 1564 por los colonos españoles, es conocido por su construcción original: un fuerte destinado a protegerse de los pueblos indígenas. Con el tiempo, este lugar se convirtió en un centro económico gracias a la minería de oro y plata en los alrededores. Su ubicación estratégica junto al río Fuerte permitió su crecimiento y relevancia histórica, y aunque en 1824 fue capital de los antiguos estados de Sonora y Sinaloa, con el paso de los años ha mantenido su identidad como un símbolo de la riqueza cultural de México.
¿Qué hacer en El Fuerte?
El Fuerte ofrece una amplia variedad de actividades para los viajeros. Puedes pasear por su centro histórico y admirar las fachadas de las casas coloniales, visitar el Museo Mirador El Fuerte para conocer más sobre su historia y explorar el Cerro de la Máscara, un sitio arqueológico que alberga más de 300 petroglifos.
Uno de los destinos más interesantes es Tehueco, donde la fusión de creencias prehispánicas y católicas dio origen a uno de los centros ceremoniales más importantes de la región. Aquí puedes conocer la misión jesuita, la iglesia de Dolores y el Museo Comunitario Miguel Ángel Morales Ibarra, que exhibe objetos de la tradición ceremonial Yoreme.
La oferta gastronómica de El Fuerte es igualmente variada, con restaurantes como Bonifacios, donde podrás disfrutar de una cocina de fusión inspirada en los sabores de México, o El Mesón del General, que ofrece platillos tradicionales en un ambiente lleno de historia.
En cuanto a alojamiento, El Fuerte cuenta con lugares únicos como la Hacienda Santa Cruz y el Mansion Serrano Hotel, que combinan el encanto colonial con comodidades modernas para ofrecer una estancia agradable.