El equipo de campaña de Alejandro Armenta no ha tardado en expresar su escepticismo y crítica hacia las propuestas presentadas por Eduardo Rivera, candidato de la oposición del PAN. Luis Antonio Godina Herrera, subcoordinador de Diálogos por la Transformación, ha desmontado una a una las promesas de Rivera, calificándolas de técnicamente inviables y financieramente irresponsables.
Con un análisis detallado, Godina Herrera destacó la propuesta de Rivera de distribuir microcréditos por valor de 6 mil millones de pesos sin intereses, tildándola de costosa y poco práctica. Además, señaló el proyecto de construir 20 mil calles y mil kilómetros de carreteras, con un costo estimado de 47 mil millones de pesos, como una fantasía económica inalcanzable dentro del presupuesto estatal.
Por su parte, Edurne Ochoa, coordinadora de Vocería, ha sido igual de crítica con las promesas del candidato del PAN, especialmente aquellas que sugieren una expansión masiva de programas sociales y la construcción de 500 nuevas Estancias Infantiles, lo que considera un despropósito financiero y logístico.
Además, Ochoa ha acusado a la oposición de hipocresía, señalando la contradicción en sus promesas de combatir la violencia y el huachicol, áreas en las que han fallado en el pasado. También criticó la falta de propuestas concretas para las mujeres, destacando el papel crucial que representan en la sociedad y rechazando su minimización a un «grupo vulnerable».
Este intercambio de acusaciones subraya la intensidad de la contienda electoral en Puebla, donde las propuestas y la viabilidad financiera de las mismas se han convertido en un punto crítico de debate. Mientras el equipo de Armenta advierte a los votantes sobre lo que consideran promesas vacías, el panorama político poblano se caldea a medida que se acercan las elecciones.