La hidromiel, esa bebida milenaria que evoca imágenes de vikingos y banquetes nórdicos, ha encontrado un nuevo hogar en la Ciudad de México. Conocida como mead en inglés, esta bebida fermentada hecha de agua y miel es una de las más antiguas del mundo y se ha popularizado notablemente en la capital mexicana. Si buscas experimentar el gusto auténtico de la cultura vikinga a través de sus sabores tradicionales, no te pierdas de visitar estos cuatro locales destacados.
Colonia Bar and Meadery es pionero en la escena del hidromiel en la Ciudad de México. Este bar no solo sirve la bebida, sino que también se dedica a su estudio y elaboración, ofreciendo una experiencia educativa junto con sabores únicos.
Lazarus & Colin Meadery, escondido y un poco misterioso, te permite adentrarte en el proceso de fabricación del hidromiel. Este sitio no solo ofrece degustaciones, sino también la oportunidad de aprender sobre la historia y la producción de esta bebida ancestral.
La Taberna del Chaman es conocido por su ambiente acogedor y su diversa oferta de hidromiel. Es un lugar excelente para aquellos interesados en profundizar en la mitología y las características que hacen única a esta bebida.
La Belga, aunque pequeño, tiene una impresionante selección de hidromiel y cervezas artesanales. Aquí, los aficionados pueden disfrutar de variaciones clásicas y experimentales de hidromiel, en un entorno íntimo ideal para conversaciones profundas sobre cultura y bebidas.
Cyprez Tap Room, con un ambiente moderno y acogedor, es ideal para probar hidromiel con sabores innovadores como granada y jengibre o frambuesa, ofreciendo una experiencia refrescante y diferente para los paladares más aventureros.
Estos lugares no solo son puntos de venta; son embajadores de una tradición milenaria que cada día gana más adeptos. Ya sea por la curiosidad cultural o el simple placer de probar algo nuevo y emocionante, visitar estos sitios es una manera perfecta de disfrutar de una tarde o noche en la Ciudad de México.