Por Juan Pablo Ojeda
El gobierno de Australia ha tomado una firme postura contra la inteligencia artificial (IA) desarrollada por la empresa china DeepSeek, al prohibir su instalación en dispositivos de los organismos gubernamentales debido a los riesgos que representa para la seguridad nacional. Esta medida, anunciada por el ministro del Interior, Tony Burke, busca proteger la infraestructura tecnológica del gobierno australiano de posibles amenazas externas, siguiendo las recomendaciones de las agencias de inteligencia y seguridad nacional.
A partir de ahora, todos los organismos gubernamentales, con excepción de instituciones como Australia Post y el canal ABC, deberán eliminar DeepSeek de sus dispositivos y reportar la acción, según lo estipulado por la nueva directiva. Sin embargo, los funcionarios aún podrán usar la plataforma en sus dispositivos personales, lo que refleja el enfoque selectivo de la política, dirigida a proteger los sistemas oficiales sin limitar completamente el uso privado de la tecnología.
Preocupaciones sobre la privacidad y el almacenamiento de datos
La decisión de Australia se alinea con una creciente preocupación global sobre el uso de tecnologías de IA de origen chino y sus implicaciones en la privacidad de los usuarios y la seguridad nacional. La medida se da justo después de que el ministro australiano de Ciencia, Ed Husic, expresara su inquietud sobre la gestión de la privacidad de los usuarios de DeepSeek, especialmente en relación con el almacenamiento de datos y la calidad de la información procesada por la aplicación.
Husic había señalado anteriormente que «hay muchas preguntas que necesitan respuesta en términos de calidad, preferencias de los consumidores, almacenamiento de datos y la gestión de la privacidad», instando a los ciudadanos a reflexionar cuidadosamente antes de descargar la aplicación.
Impacto en el mercado global de IA
El anuncio de Australia llega apenas una semana después de que la irrupción de DeepSeek sorprendiera a expertos y revolucionara los mercados financieros. Las caídas en los valores de empresas como Nvidia, clave en la fabricación de los microchips utilizados por la IA, evidencian el impacto global de este tipo de tecnologías, que generan tanto interés como preocupación.
Australia no es el único país que ha tomado medidas contra DeepSeek y otras tecnologías de origen chino. Italia, el estado de Texas en Estados Unidos y partes del Ejército estadounidense también han implementado restricciones similares, reflejando una tendencia mundial en la que las naciones están tomando precauciones ante el potencial uso de la IA para influir en asuntos nacionales.
Precedentes de seguridad nacional en Australia
La decisión de Australia se suma a una serie de acciones tomadas en el pasado relacionadas con preocupaciones de seguridad nacional. En 2023, Australia prohibió el uso de la red social TikTok en dispositivos gubernamentales por razones similares, citando el riesgo de interferencia extranjera. Además, en 2018, el país decidió excluir a la empresa china Huawei de la implementación de sus servicios de 5G, argumentando que el uso de su tecnología podría poner en peligro la seguridad de las comunicaciones en Australia.
La creciente preocupación sobre las aplicaciones y dispositivos chinos ha puesto de relieve los desafíos que enfrentan los gobiernos para equilibrar los avances tecnológicos con la protección de la privacidad y la seguridad nacional en un mundo cada vez más interconectado.