Un cuadro de menos de 50 dólares comprado en 2016 en una venta de garaje podría ser, en realidad, una obra perdida de Vincent Van Gogh. Tras una investigación exhaustiva, realizada por un equipo multidisciplinario de expertos, el óleo podría ser una pieza clave en la historia del arte.
LMI Group International, empresa encargada de la autentificación, asegura que la pintura, titulada “Elimar”, data de 1889, un año antes de la muerte de Van Gogh, y que fue realizada durante su tiempo en el sanatorio psiquiátrico de Saint-Remy. La investigación, que duró cuatro años, involucró a una veintena de especialistas y utilizó tanto técnicas tradicionales como tecnologías avanzadas.
El informe concluye que Van Gogh se inspiró en una obra del pintor danés Michael Ancher, que muestra a un pescador danés con un paisaje marino de fondo. Además, la pintura presenta la inscripción «Elimar» en la manga de la chaqueta del personaje, un nombre que también aparece en una novela de Hans Christian Andersen. Aunque el cuadro no lleva la firma de Van Gogh, este hallazgo ha despertado el interés de los expertos.
El análisis del contexto histórico, los pigmentos utilizados y una serie de pruebas científicas, como un análisis matemático de las letras inscritas en la pintura, apoyan la teoría de que “Elimar” podría ser un trabajo auténtico de Van Gogh. Además, un análisis genético de un cabello encontrado en la obra sugiere que pertenece a un hombre, aunque no se pudo rastrear una conexión directa con los descendientes del pintor.
Si el Museo Van Gogh autentifica la pintura, su valor podría superar los 15 millones de dólares, un precio que refleja la importancia de este descubrimiento en el mundo del arte. El cuadro, además, destaca por su posible conexión con los momentos finales de la carrera del pintor neerlandés, quienes creó algunas de sus obras más reconocidas durante su internamiento en el sanatorio