Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, mostró su rotundo desacuerdo con la medida del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien autorizó nuevas redadas migratorias en lugares considerados previamente “protegidos”, como escuelas, colegios e iglesias. En su conferencia matutina, Sheinbaum fue clara al señalar que México no está de acuerdo con esta decisión y expresó la postura del gobierno mexicano frente a lo que considera una violación a los derechos de los migrantes.
“Por supuesto que no estamos de acuerdo con dicha medida”, señaló la mandataria, quien reiteró que México siempre buscará proteger a sus connacionales en territorio estadounidense.
La medida fue tomada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de EE.UU. después de que revocara una directriz implementada por la administración del expresidente Joe Biden. Dicha directriz prohibía realizar redadas migratorias cerca de lugares considerados sensibles para la comunidad, como escuelas y centros religiosos, que ahora estarán bajo el riesgo de ser escenario de arrestos masivos. El gobierno de Trump justificó su decisión al argumentar que los agentes migratorios necesitan “seguir las leyes” y que existen “criminales extranjeros” que se refugian en estos lugares para evadir la captura, aunque no presentó pruebas específicas para respaldar tal afirmación.
Esta medida llegó justo un día después de que Trump asumiera nuevamente la presidencia, reforzando su promesa de campaña de ejecutar una de las mayores campañas de deportación de migrantes en la historia de Estados Unidos.
Frente a este panorama, Sheinbaum destacó que el gobierno mexicano está tomando acciones para apoyar a los migrantes que puedan verse afectados por las nuevas políticas. En ese sentido, ordenó al canciller mexicano coordinar esfuerzos con los consulados de México en EE.UU. para ofrecer asistencia legal a los migrantes y brindar apoyo a quienes deseen regresar al país de manera voluntaria. Para ello, el gobierno mexicano ha activado el programa “México te abraza”, que tiene como objetivo recibir a los connacionales deportados o que decidan regresar por voluntad propia.
“Nosotros lo que hacemos es apoyarlos legalmente y recibirlos en México con el programa ‘México te abraza’. Además, si hay personas que no sean mexicanas en la frontera, también les damos apoyo humanitario”, afirmó la presidenta.
Las políticas de deportación impulsadas por Trump representan una preocupación para México, ya que los mexicanos constituyen aproximadamente la mitad de los 11 millones de indocumentados en EE.UU. Además, las remesas enviadas por los migrantes mexicanos son un pilar importante de la economía nacional, representando casi el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) de México, con una cifra estimada de 65.000 millones de dólares recibidos en 2024.