CDMX a 2 de septiembre, 2023.- ¡Agárrense los cinturones, amigos y amigas, porque septiembre ha llegado con una razón más para sonreír y sacar la fiesta interior que llevamos dentro! ¿Sabían que este mes no solo se celebra el día nacional del cacao y el chocolate, sino que también el 13 de septiembre es el día internacional del cacao? ¡Así que prepárense para una dosis extra de alegría y dulzura en sus vidas!
¿Y qué mejor manera de comenzar el mes que con una fiesta nacional para el cacao mexicano? El 2 de septiembre ha sido oficialmente coronado como un día para celebrar, ¡así que saquen sus tazas y preparen su chocolate caliente! No hay excusas para no sumergirse en el sabor y la historia que nos ofrece este delicioso tesoro mexicano.
Pero eso no es todo, amigos, porque septiembre es el mes del cacao en todo su esplendor. Resulta que el cacao solo tiene dos momentos al año para ser cosechado, y uno de ellos está ocurriendo justo en estos días. ¡Así que asegúrense de disfrutar de su dosis diaria de chocolate para no quedarse atrás en esta celebración natural!
Y hablando de historia, el cacao es una verdadera joya en la corona de nuestra cultura. Es originario de estas tierras y ha estado presente en nuestras costumbres, tradiciones e incluso en la forma en que estructurábamos nuestras relaciones sociales desde tiempos inmemoriales. Imagínense, ¡el cacao era tan valioso que se usaba como moneda de cambio! ¿Quién necesita dinero cuando puedes comerciar con chocolate?
Pero eso no es todo, ¡el cacao también tenía un papel importante en la cosmovisión de las antiguas culturas prehispánicas! La leyenda cuenta que Quetzalcóatl, el dios serpiente emplumada, robó el cacao del Edén de los dioses para compartirlo con los humanos. Según la historia, el cacao les dio sabiduría, conocimiento y el poder de crear arte, que antes era exclusivo de los dioses. ¿Quién necesita un manzano cuando tienes un árbol de cacao en tu jardín?
Claro, esto no cayó muy bien entre los dioses, que en un ataque de celos emborracharon a Quetzalcóatl con pulque para que se avergonzara y huyera. Pero antes de partir, esparció las semillas de cacao en las fértiles tierras de Tabasco y Veracruz, donde florecieron los hermosos árboles de cacao. Así, el cacao se convirtió en un símbolo del amor de Quetzalcóatl hacia la humanidad, algo así como su regalo de despedida.
Este regalo era tan especial que durante un tiempo, la preparación de la bebida de cacao fue un privilegio reservado solo para guerreros y sacerdotes de alto rango. ¡Se creía que al beberla, uno podía comunicarse con los dioses! Nada mal para una bebida, ¿verdad?
En resumen, amigos y amigas, el cacao y el chocolate son mucho más que un simple placer culposo; son una parte fundamental de nuestra cultura y un regalo de amor de Quetzalcóatl a la humanidad. Así que, mientras disfrutan de su chocolate caliente este mes, recuerden que están saboreando un pedacito de historia y un toque divino. ¡Feliz mes del cacao y el chocolate, y que siga fluyendo el amor y la dulzura en sus vidas!