CDMX a 16 de mayo, 2024.- En un giro inesperado, Mario Delgado, presidente nacional de Morena, ha acusado a Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la coalición opositora «Fuerza y Corazón por México», de registrar la marca «Fuerza Rosa» ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). Según Delgado, esta acción desmiente el supuesto carácter ciudadano de la movilización conocida como «Marea Rosa».
Durante una conferencia de prensa, el líder morenista aseguró que Gálvez registró la marca «Fuerza Rosa» desde octubre de 2023 con el objetivo de utilizarla para el reclutamiento de voluntarios y operadores políticos, así como para la difusión de campañas políticas.
«Resulta que Xóchitl Gálvez registró ante el IMPI ‘Fuerza Rosa’ como marca a su nombre, desde octubre de 2023 (…) Entonces, todo fue una gran mentira: la marcha ciudadana, la ‘Marea Rosa’, la espontaneidad de la sociedad civil manifestándose para defender la democracia. Todo fue una farsa, estaba perfectamente planeado», declaró Delgado.
Hasta el momento, Xóchitl Gálvez no ha respondido directamente a las acusaciones de Mario Delgado. Sin embargo, en declaraciones previas, la candidata opositora ha defendido el carácter ciudadano de la «Marea Rosa» y ha asegurado que su participación en la marcha del próximo 19 de mayo será fiscalizada por el Instituto Nacional Electoral (INE).
La «Marea Rosa» surgió en noviembre de 2022 como un movimiento ciudadano en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) y en contra de la reforma electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Desde entonces, ha organizado varias movilizaciones masivas, incluyendo la próxima del 19 de mayo, en la que Gálvez y Santiago Taboada, candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, participarán como oradores.
Las acusaciones de Mario Delgado han reavivado la polémica en torno a la «Marea Rosa» y su supuesta vinculación con los partidos políticos de oposición. Mientras Morena insiste en que se trata de una «farsa», los organizadores y candidatos opositores defienden su carácter ciudadano. La controversia promete continuar en las semanas previas a las elecciones del 2 de junio.