Por Juan Pablo Ojeda
En un acto reciente transmitido por el canal estatal VTV, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, lanzó un enérgico llamamiento a su vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, para que le muestre al ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, el Acta de la Independencia de Venezuela del 5 de julio de 1811. Según Maduro, este gesto tiene el propósito de subrayar que Venezuela es y seguirá siendo completamente independiente de España y del resto del mundo.
“Delcy, llama a tu amigo el canciller de España y explícale, muéstrale el Acta de la Independencia del 5 de julio y el Parte de Simón Bolívar de la Batalla de Carabobo para que sepa que Venezuela es y será irremediablemente libre, soberana, independiente de Madrid, de España y del mundo entero”, manifestó el mandatario venezolano, enfatizando el deseo de reafirmar la soberanía de su país.
La declaración de Maduro se produce en un contexto de creciente tensión diplomática entre Venezuela y España. Este lunes, el Gobierno español negó que hubiera existido una “contrapartida” o “negociación política” con Caracas relacionada con la salida de Edmundo González Urrutia, un excandidato presidencial de la principal coalición antichavista. González Urrutia, quien se encuentra exiliado en Madrid desde el domingo, ha sido objeto de controversia, y España ha insistido en la necesidad de que se publiquen los resultados desagregados de las elecciones del 28 de julio, en las que Maduro fue declarado vencedor.
Rodríguez, por su parte, ha afirmado que se llevaron a cabo “amplias conversaciones” con España para coordinar la salida de González Urrutia y el aterrizaje de un avión de la Fuerza Aérea Española que transportó al opositor hacia Madrid. Sin embargo, Albares ha reiterado que aunque hubo contactos para permitir el aterrizaje del avión en Caracas, no hubo ninguna negociación que implicara una contrapartida.
En el Congreso español, la situación también ha generado debate. Este martes, se discutió una proposición no de ley presentada por el Partido Popular (PP) que solicita al gobierno de Pedro Sánchez el reconocimiento de González Urrutia como “presidente electo”. Esta proposición será votada el miércoles.
La respuesta de Maduro a estas tensiones ha sido feroz. El presidente venezolano se refirió al PP y a la formación Vox como “basura” y “ultrabasura” respectivamente, acusándolos de tener un “concepto colonialista de América”. Estas declaraciones destacan la creciente polarización y el conflicto diplomático entre ambos países, así como las tensiones políticas internas en Venezuela y España.