Venezuela a 9 de agosto, 2024.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha tomado una decisión polémica al firmar una resolución que bloquea temporalmente el acceso a la plataforma de la red social X, anteriormente conocida como Twitter, en todo el país. La medida llega en un contexto de alta tensión tras las disputadas elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que el mandatario ha sido señalado por la oposición de manipular los resultados a su favor.
En una transmisión en la televisión estatal, Maduro anunció la prohibición de X por un periodo de 10 días, justificando la decisión como parte de una propuesta hecha por Conatel, el organismo regulador de las comunicaciones en Venezuela. «¡Fuera X, por 10 días, de Venezuela!», exclamó el presidente, quien también ha criticado duramente al propietario de la plataforma, Elon Musk, a quien acusa de incitar al odio y fomentar la guerra civil a través de la red social.
Maduro y Musk han tenido una relación tensa, con varios intercambios en X donde el presidente venezolano ha señalado al magnate como una figura clave detrás de las protestas que surgieron después de los comicios. Estas manifestaciones, que han dejado al menos 20 muertos y unas 2,000 personas detenidas según fuentes no gubernamentales, han sido un foco de inestabilidad en el país.
El bloqueo de X se suma a las recientes acciones de Maduro contra las grandes tecnológicas. Apenas unos días antes, el presidente había instado a sus seguidores a abandonar WhatsApp en favor de Telegram o WeChat, alegando que la aplicación propiedad de Meta estaba siendo utilizada para amenazar a las familias de soldados y policías.
En el ámbito internacional, la reacción no se ha hecho esperar. México, Colombia y Brasil han pedido conjuntamente que la autoridad electoral venezolana publique los recuentos de votos detallados, mientras que Brian Nichols, subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, afirmó en X que «las voces de los votantes venezolanos no serán silenciadas por la represión, la censura o la desinformación.»
La prohibición de X y el llamado a boicotear WhatsApp forman parte de una estrategia más amplia de Maduro para controlar las narrativas en redes sociales y limitar la influencia de plataformas que considera hostiles a su régimen.