Por Juan Pablo Ojeda
El pasado 27 de febrero, la Ciudad de México vivió una jornada de violencia sin precedentes en lo que va del año, con un total de 14 asesinatos registrados en menos de 24 horas. Bertha Alcalde Luján, fiscal de la capital, calificó este hecho como un “hecho excepcional”, al asegurar que estos homicidios no tienen relación entre sí y fueron resultado de ocho incidentes distintos.
De acuerdo con la fiscal, de los 14 homicidios, cinco fueron perpetrados con arma de fuego, mientras que los otros nueve se derivaron de riñas entre particulares. La jornada de violencia también fue confirmada como la más sangrienta de la administración de la actual jefa de Gobierno, Clara Brugada, y la más violenta en lo que va de 2025, según lo informado por Pablo Vázquez Camacho, secretario de Seguridad Ciudadana (SSC).
Los Hechos
La violencia comenzó en la mañana con un tiroteo en la colonia Chinampac de Juárez, en Iztapalapa, que dejó tres muertos. Según las primeras investigaciones, el ataque estaría relacionado con disputas entre grupos locales en la zona de Ejército Constitucionalista. Por la tarde, dos trabajadores del sector salud fueron asesinados en las inmediaciones de la Torre Insignia en Tlatelolco, Cuauhtémoc. Los dos individuos fueron interceptados por un agresor que les disparó mientras salían de su lugar de trabajo.
Horas después, en la colonia Unidad Popular Tepeaca, ubicada en la alcaldía Álvaro Obregón, cuatro hombres fueron asesinados en una balacera. Testimonios de vecinos apuntan a que al menos 15 disparos acabaron con las vidas de las víctimas. Las autoridades investigan que este multihomicidio está relacionado con disputas entre grupos locales en la zona de Cehuayo.
Además, otro asesinato ocurrió en un gimnasio de la colonia Doctores, en Cuauhtémoc, donde un hombre fue atacado por un joven canadiense de 19 años. Este hombre perdió la vida durante su traslado a un hospital. En el Centro Histórico, una riña terminó con la muerte de un hombre tras ser agredido con un arma blanca, mientras que en la Central de Abasto, otro hombre fue asesinado con un picahielo durante una pelea.
Finalmente, en Álvaro Obregón, un hombre fue atacado con una varilla por un vecino tras una discusión de tránsito, y la herida provocó su muerte durante el traslado al hospital.
Reacciones y Detenciones
La fiscal Alcalde Luján subrayó que la jornada de violencia del 27 de febrero fue un evento aislado, pero que generó gran preocupación en las autoridades. Hasta el 2 de marzo, el gabinete de seguridad de la CDMX había detenido a siete personas presuntamente involucradas en seis de los casos, mientras que hay líneas de investigación abiertas para esclarecer los otros dos homicidios restantes.
Esta ola de violencia ha puesto de nuevo en la agenda la urgencia de reforzar la seguridad en la capital mexicana y la necesidad de que las autoridades continúen con sus esfuerzos para desarticular los grupos criminales que operan en distintas zonas de la ciudad.