La Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) lanzó una campaña en aras de lograr la detención de los capos mexicanos más buscados.
Se trata de Rafael Caro Quintero, Ismael ‘el Mayo’ Zambada, Iván Archivaldo Guzmán y Jesús Alfredo Guzmán los personajes por los cuales la DEA ofrece 45 millones de dólares a quienes den información que derive en su captura.
La estrategia de la DEA consiste en distribuir pósteres en donde viene la suma de dinero ofrecida por información de cada uno de los capos mexicanos. Por Caro Quintero, la agencia estadounidense ofrece 20 millones de dólares, por ‘el Mayo’, 15 millones de dólares; mientras que por los hijos de Joaquín ‘el Chapo’ Guzmán dan cinco millones de dólares por cada uno.
El periodista estadounidense y corresponsal del diario The New York Times Ioan Grillo difundió en sus redes sociales unos de los pósteres de la DEA, los cuales fueron pegados incluso en la frontera con Tijuana.
Actualmente, el Gobierno de Estados Unidos se encuentra en una batalla contra el fentanilo, un letal opioide sintético más potente que la morfina que el crimen organizado trafica hacia EEUU y cuyos decomisos se han acrecentado considerablemente en México.
De acuerdo con el titular de la Defensa mexicana, Luis Crescencio Sandoval, los volúmenes de droga incautada crecieron un 525% desde que comenzó la actual administración, el 1 de diciembre de 2018.
El consumo de ese opioide derivado de la amapola o adormidera, procesada con potentes precursores químicos, creció durante la pandemia de coronavirus, causando lo que las autoridades de EEUU consideran como una «epidemia de sobredosis», que se desencadenó con el encierro ordenado para contener los contagios de COVID-19.