La selección mexicana juvenil ha iniciado con el pie derecho su gira por Sudamérica, una etapa clave en su preparación hacia la Copa del Mundo 2026, que se disputará en casa junto con Estados Unidos y Canadá. El pasado jueves, el combinado dirigido por Javier “Vasco” Aguirre venció 2-0 al Internacional de Porto Alegre en el estadio Beira-Rio, dejando gratas sensaciones dentro y fuera del campo.

Con un plantel compuesto exclusivamente por jugadores de la Liga MX, el equipo nacional destacó no solo por su triunfo, sino también por el debut histórico de Gilberto Mora, quien a sus 16 años se convirtió en el jugador más joven en representar al tricolor a nivel juvenil. Este hito refleja el enfoque renovado en el desarrollo de talento joven.

Los goles del encuentro fueron obra de Erik Lira y Jorge Ruvalcaba, quienes aprovecharon oportunidades clave en el primer tiempo para sellar la victoria. Lira abrió el marcador al minuto 34 con un disparo preciso dentro del área tras un pase de Jesús Gallardo. Apenas un minuto después, el portero brasileño Antoni Souza evitó momentáneamente el segundo tanto al detener un disparo de Ruvalcaba. Sin embargo, al final del segundo tiempo, Ruvalcaba se redimió con una definición impecable tras un pase largo de Elias Montiel.

El partido, disputado en tierras brasileñas, también destacó por las intervenciones clave de Antoni Souza, quien frustró al ataque mexicano en varias ocasiones. No obstante, el dominio de los visitantes en el primer tiempo fue suficiente para consolidar el triunfo. La segunda mitad careció de emociones debido a los cambios tácticos realizados por ambos entrenadores, centrándose más en el análisis y la rotación del plantel.

El próximo desafío de la selección juvenil será este martes frente a River Plate, en el icónico estadio Monumental de Buenos Aires, Argentina. Este encuentro representa una oportunidad de oro para medir el nivel del equipo ante uno de los clubes más prestigiosos del continente.

Con una combinación de resultados positivos y promesas emergentes como Gilberto Mora, el futuro del tricolor luce brillante. Esta gira no solo sirve como preparación física y táctica, sino también como un escaparate para el talento mexicano en el camino al Mundial 2026.