Por Juan Pablo Ojeda
La tarde del miércoles, un grupo de estudiantes de Derecho y profesores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) tomaron las calles en una marcha desde Ciudad Universitaria hasta el Consejo de la Judicatura Federal (CJF). La protesta fue en rechazo a la Reforma al Poder Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador en febrero de este año, que ha generado un gran debate a nivel nacional.
Desde Palacio Nacional, López Obrador no tardó en responder a la manifestación. En su conferencia matutina, el presidente acusó a los profesores de la Facultad de Derecho y del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de manipular a sus alumnos. Según AMLO, los docentes estaban engañando a los estudiantes al presentar la reforma como algo injusto e ilegal.
El mandatario no se anduvo con rodeos al decir que estos maestros estaban menospreciando la inteligencia de los jóvenes, sugiriendo que eran ellos quienes estaban mal informados. Esta afirmación generó una ola de críticas, con varios usuarios en redes sociales defendiendo la autonomía y el criterio de los estudiantes. “Decir que nos engañan es minimizar la inteligencia de los estudiantes universitarios. Sigue ofendiendo a todo aquel que no esté de acuerdo con sus desvaríos”, comentó Ana McCartney en X.
En respuesta a las acusaciones del presidente, la comunidad universitaria ha salido en defensa de sus derechos y su autonomía. Rodolfo Martínez, abogado y profesor de la Facultad de Derecho, desmintió las acusaciones del presidente. En un mensaje en Facebook, Martínez aseguró que sus alumnos estaban plenamente informados sobre los riesgos de la reforma y que no necesitaban ser guiados por sus profesores para decidir su postura. “Mis alumnos de la Cátedra de Juicio de Amparo y Derecho Procesal Constitucional están plenamente conscientes del peligro de dicha reforma. No necesitan que se les diga qué hacer”, afirmó.
Francisco Burgoa, otro destacado catedrático de la misma facultad, también salió al paso de las críticas del presidente. En su cuenta de X, Burgoa defendió el papel de los docentes en la formación de juristas comprometidos con los principios democráticos. “Las y los maestros de la Facultad de Derecho de la UNAM no engañamos a nuestros estudiantes; al contrario, les enseñamos a defender la Constitución, la justicia y la democracia”, escribió. Según él, la protesta de los estudiantes es una manifestación legítima de sus derechos y su compromiso con los valores democráticos.
La Reforma al Poder Judicial, que busca cambiar la estructura y funcionamiento del sistema de justicia en México, ha sido un tema controversial. Sus detractores, incluidos los estudiantes y profesores de la UNAM, argumentan que podría poner en riesgo la independencia del poder judicial y debilitar el sistema de justicia del país. Por otro lado, el gobierno defiende que la reforma es necesaria para mejorar la eficiencia y transparencia del sistema judicial.
La disputa refleja una creciente tensión entre el poder ejecutivo y la academia, subrayando la importancia de mantener un diálogo abierto y respetuoso sobre las reformas que afectan a la justicia y a la democracia en México.