El fundador y CEO de SpaceX, Elon Musk, anunció el sábado que los satélites de internet Starlink de la compañía ya están activos en Ucrania, mientras el país sufre cortes de energía por la invasión rusa.
«El servicio Starlink ya está activo en Ucrania», tuiteó Musk, el también CEO de Tesla. «Más terminales en camino».
El vice primer ministro de Ucrania pidió a Musk que proporcionara servicio de internet al país en medio de los ataques rusos, y Musk cumplió, según un intercambio de Twitter entre ambos el sábado.
Mykhailo Fedorov, que también es ministro ucraniano de transformación digital, tuiteó a Musk: «Mientras tú intentas colonizar Marte… ¡Rusia intenta ocupar Ucrania! Mientras tus cohetes aterrizan con éxito desde el espacio, los cohetes rusos atacan a la población civil ucraniana. Te pedimos que proporciones a Ucrania estaciones Starlink y que te dirijas a los rusos sensatos para que se mantengan a la altura».
Starlink es una constelación de satélites de internet que pretende cubrir el planeta con banda ancha de alta velocidad y que podría llevar la conectividad a miles de millones de personas que aún carecen de un acceso fiable a Internet.
La idea requiere un enjambre de satélites que operen en la órbita terrestre baja -a unos 547 kilómetros de altura, en el caso de SpaceX- para proporcionar una cobertura continua.
El intercambio de mensajes en Twitter tuvo lugar mientras el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenaba que las fuerzas de disuasión de su país, que incluyen armas nucleares, se pusieran en alerta máxima. El viceministro del Interior ucraniano, Evgeny Yenin, dijo que las conversaciones entre las delegaciones rusa y ucraniana tendrán lugar el lunes por la mañana.
Se han producido cortes de energía «intermitentes» en Ucrania, pero internet sigue estando «generalmente disponible», dijo el sábado a periodistas un alto funcionario de defensa estadounidense.
El sistema Starlink se utilizó recientemente en Tonga, en el Océano Pacífico Sur, para proporcionar servicio de internet para conectar pueblos remotos tras la erupción de un volcán submarino en enero, según SpaceX. La erupción fue probablemente la mayor registrada en cualquier lugar del planeta en más de 30 años