El agua podría haberse formado en el universo primitivo antes de lo que se pensaba, sugiere estudio

Por Juan Pablo Ojeda

 

Un estudio reciente publicado en Nature Astronomy ha revolucionado nuestra comprensión sobre el origen del agua en el universo. Según la investigación, liderada por el experto Daniel Whalen, de la Universidad de Portsmouth (Reino Unido), el agua podría haberse formado entre 100 y 200 millones de años después del Big Bang, mucho antes de lo que los científicos habían asumido previamente. Este descubrimiento sugiere que el agua podría haber sido un componente clave en la formación de las primeras galaxias.

Utilizando modelos informáticos de dos supernovas —una de una estrella de 13 veces la masa del Sol y otra de 200 veces la masa solar—, el equipo de investigación analizó los productos generados por las explosiones de estas estrellas. El estudio reveló que, incluso antes de que se formaran los bloques fundamentales de nuestra propia galaxia, el agua ya estaba presente en el universo.

Muhammad Latif, uno de los firmantes del estudio y académico de la Universidad de Emiratos Árabes Unidos, señaló que el agua se formó a partir de los componentes básicos de hidrógeno y oxígeno, elementos que se originan de diversas maneras. Los elementos más ligeros, como el hidrógeno y el helio, nacieron durante el Big Bang, mientras que el oxígeno, esencial para la formación de agua, surgió de reacciones nucleares dentro de estrellas o explosiones de supernovas.

El equipo de investigación descubrió que en las simulaciones realizadas, el oxígeno se generó en cantidades que variaron según el tipo de supernova. En la primera simulación, el oxígeno alcanzó 0.051 masas solares, mientras que en la segunda supernova, los resultados fueron mucho más significativos, con 55 masas solares de oxígeno. A medida que este oxígeno se enfriaba, se mezclaba con el hidrógeno circundante, lo que permitía la formación de agua en estado gaseoso, acumulándose en densos discos.

Estos discos de agua podrían haber sido clave en la formación de planetas habitables en las primeras etapas del universo, conocidos como el “amanecer cósmico”. Sin embargo, este proceso no estuvo exento de desafíos. La radiación proveniente de la formación estelar posterior podría haber destruido el agua, aunque el polvo estelar podría haber proporcionado la protección necesaria para preservar el agua de dicha radiación, un aspecto que los investigadores planean explorar en estudios futuros.

De acuerdo con las simulaciones, los primeros vestigios de agua formados en la primera supernova representaron una masa equivalente a la cienmillonésima parte de una masa solar. En la segunda simulación, el agua alcanzó aproximadamente 0.001 masas solares en un periodo de 3 millones de años.

Este descubrimiento abre nuevas posibilidades sobre la formación del agua en el universo temprano y sus implicaciones para la creación de condiciones habitables en planetas primitivos.

También te podría interesar

Deja un comentario