Ecuador a 6 de abril, 2024.- En un acontecimiento sin precedentes que ha escalado a una crisis diplomática, la Policía Nacional de Ecuador irrumpió en la Embajada de México en Quito, deteniendo al exvicepresidente Jorge Glas, quien había recibido asilo político de México. Este audaz operativo ha llevado a México a suspender las relaciones diplomáticas con Ecuador, marcando un momento de tensión entre ambas naciones.
El exvicepresidente Glas, buscado por las autoridades ecuatorianas por peculado, encontró refugio en la embajada mexicana, donde se preparaba su traslado seguro a México bajo el asilo político concedido por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, la acción de la Policía Nacional, utilizando vehículos blindados para entrar en la embajada, ha generado un escándalo internacional.
Roberto Canseco, el jefe de Cancillería de la misión mexicana en Ecuador, denunció haber sido agredido físicamente por los uniformados durante la irrupción. «A riesgo de mi vida defendí el honor y la soberanía de mi país», expresó Canseco, destacando la gravedad del asalto a un recinto diplomático, considerado territorio extranjero bajo el derecho internacional.
Las imágenes y relatos del incidente muestran una situación caótica, con el embajador mexicano luchando físicamente para impedir la detención de Glas. Este hecho no solo plantea serias preguntas sobre la violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, sino que también pone en riesgo la vida del exvicepresidente, según expresó el mismo Canseco.
En respuesta a la violación de su soberanía diplomática, México ha tomado la decisión drástica de suspender las relaciones diplomáticas con Ecuador. El presidente López Obrador calificó la irrupción como un acto fuera de toda norma y un ataque directo a la soberanía mexicana.
Este incidente no solo ha causado una fractura entre Ecuador y México, sino que también ha llamado la atención internacional sobre el respeto a las normas diplomáticas y la protección que deben ofrecer las embajadas a los asilados políticos. La comunidad internacional espera con ansias la resolución de este conflicto, que ha puesto de manifiesto las delicadas relaciones entre los estados y el derecho internacional.