¿Depende realmente la calidad del sueño de la hora a la que nos acostamos?
Editor web Maya Comunicación Hay muchas teorías sobre el momento ideal para aventurarse en la Tierra de los Sueños, por ejemplo, «Acostarse temprano, levantarse temprano, hace que un hombre sea saludable, rico y sabio», claramente aboga por irse a dormir mucho antes de que la noche haya terminado realmente. comenzó a ponerse en marcha. Sin embargo, como suele ser el caso, no es tan simple.
De hecho, la forma en que duermes no tiene nada que ver con la hora a la que te acuestas, según una entrevista reciente con el destacado experto en insomnio, Roman Buzunov, y la neuróloga y somnóloga, Elena Tsareva.
Buzunov, médico de honor de la Federación Rusa y jefe del Centro de Medicina del Sueño en la Clínica de Rehabilitación en Khamovniki, dijo que el mayor error es que disfrutarás de una noche de sueño saludable si te acuestas antes de las 10 p. m. o la medianoche.
Dijo que esto no es necesario y que puedes irte a la cama en cualquier momento . El secreto, agregó, es “engañar” a tu cerebro al estar en un espacio de luz que gradualmente se oscurece, creando la sensación de la tarde.
El peligro para el cuerpo, según el médico, es cuando no hay un horario claro para dormir.
“El cuerpo no entiende cuándo y qué hormona debe producir. Es importante levantarse y acostarse aproximadamente a la misma hora. Además, si una persona se levanta a las 6 a. m. los días de semana y al mediodía los fines de semana, esa persona está durmiendo lo suficiente, pero las zonas horarias se han cambiado, y el lunes por la noche tendrá que acostarse más temprano para compensar”. el doctor dijo.
Buzunov, autor de How to Overcome Insomnia: Healthy Sleep in Six Weeks, enfatizó que el cuerpo necesita un día para adaptarse a la diferencia de cada hora.
Su colega, la neuróloga y somnóloga Elena Tsareva, dijo que hay un período dorado antes de acostarse.
“Estas son dos horas en las que debes eliminar todo lo que interfiere. Por regla general, nos referimos a ‘todo’: la luz, que reduce el nivel de melatonina, especialmente el espectro blanco y azul, la comida, el ejercicio físico intenso y las emociones desagradables. Pueden influir en el sueño y su contenido, indica la investigación”, explicó el doctor.
