Tener plantas de romero en casa es una bendición: su aroma y sus usos culinarios reclaman un espacio en la cocina y, por ello, un pequeño huerto de aromáticas es una excelente opción. Además, estas plantas son un polo de atracción de polinizadores, reactivando la actividad en cualquier huerto.
El romero no solo es asequible y fácil de encontrar en cualquier centro de jardinería, sino que también puede reproducirse por esqueje, lo que permite obtener nuevos ejemplares a partir de otras ramas. Sin embargo, es crucial saber cuál es la parte correcta de la planta para garantizar su viabilidad.
Cómo reproducir el romero por esqueje
Para reproducir romero por esqueje, hay que fijarse en el color de las hojas. Las ramas más jóvenes son de un verde claro, a veces blanquecino, mientras que las más viejas tienen un verde oscuro intenso. Es importante elegir tallos con este color y madurez para asegurar el futuro de la planta.
No es necesario elegir una rama que salga directamente de la raíz ni cavar en la tierra. Basta con cortar ramas del color más oscuro posible y con longitudes de unos 15 centímetros. Además del esqueje, necesitarás pocos instrumentos y materiales: unas tijeras esterilizadas, una maceta y tierra.
Proceso de plantación
- Corta la rama: Usa tijeras esterilizadas para evitar plagas.
- Planta la rama: Inserta la rama en una maceta con tierra.
- Cuida la planta: Mantén la tierra húmeda (no encharcada) y asegúrate de que esté en un lugar luminoso.
Después de unos 30 días, la rama debería echar raíces y engancharse. Con estos cuidados, podrás disfrutar de una planta de romero saludable y lista para usar en tus recetas y en tu jardín.