Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó en la conferencia matutina desde Palacio Nacional que el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, y el nuevo secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, sostendrán una comunicación en las próximas horas, marcando así el inicio de un nuevo ciclo de diálogo entre ambos gobiernos.
Sheinbaum destacó la importancia de este primer acercamiento, señalando que se llevará a cabo entre hoy y mañana. «Estamos esperando ya la comunicación entre el canciller y el secretario de Estado de los EE. UU., para comenzar las conversaciones bilaterales que son indispensables con la llegada del presidente Trump», indicó. La mandataria enfatizó que el objetivo de estas conversaciones es establecer un diálogo respetuoso entre México y Estados Unidos, dado el contexto de la nueva administración estadounidense.
Este es un paso crucial para mejorar las relaciones entre ambos países, especialmente en un momento en que la política migratoria de EE. UU. es un tema de alta prioridad. En este sentido, Sheinbaum subrayó que el canciller De la Fuente tiene instrucciones claras de exponer la posición de México respecto al tema migratorio, centrada en la importancia de abordar las causas de la migración. «Lo mejor es atender las causas, invertir y apoyar a las personas que tienen que migrar por necesidad. Eso lo vamos a seguir insistiendo con el Gobierno de EE. UU.», destacó Sheinbaum.
El nombramiento de Marco Rubio como secretario de Estado de EE. UU. fue confirmado este lunes por unanimidad por el Senado de Estados Unidos, convirtiéndose en el primer hispano en dirigir la diplomacia estadounidense. Rubio, quien es hijo de migrantes cubanos, asumió el cargo justo antes de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. El senador desde 2010 ha logrado el respeto de sus colegas a lo largo de los años, lo que facilitó su confirmación para el gabinete de Trump, a diferencia de otros nominados.
Con este cambio en la administración estadounidense, México ve una oportunidad para retomar las conversaciones en áreas clave como la migración, el comercio y la seguridad. El gobierno mexicano espera que el diálogo con Rubio y otros funcionarios de alto nivel sea productivo y lleve a soluciones que beneficien a ambas naciones.
