CDMX, 29 de septiembre del 2023.- La capital mexicana amaneció conmocionada tras el violento incidente que tuvo lugar en las inmediaciones del Palacio Legislativo de Donceles. La agresión contra el diputado Miguel Ángel Macedo Escartín, perteneciente al partido MORENA, ha sacudido los cimientos del poder legislativo y ha generado un enérgico repudio por parte de distintas figuras políticas y la ciudadanía.
Desde el estrado más alto del congreso capitalino, la diputada Gabriela Salido Magos, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, se ha expresado de manera contundente contra la violencia y a favor de la paz y el diálogo. En su discurso, enfatizó que la función primordial del parlamento es servir como espacio de comunicación y encuentro. «No podemos ni debemos poner barreras a la pluralidad», señaló.
El Palacio Legislativo, históricamente, ha sido testigo y refugio de las voces más diversas de la sociedad. Las palabras de Salido Magos reiteran este compromiso, asegurando que nunca se hará uso de la fuerza para silenciar estas voces.
El énfasis en el diálogo y la pluralidad no es una novedad, pero en tiempos donde la tensión política parece elevarse, es un recordatorio oportuno. La diputada presidenta se ha mostrado firme en su compromiso con la imparcialidad y el respeto a la institucionalidad. Esta postura, más que una declaración política, representa una defensa a la democracia y a la convivencia pacífica.
Las reacciones ante el lamentable incidente no se hicieron esperar. Diversos actores políticos, ciudadanos y organizaciones civiles han levantado su voz, exigiendo justicia y condenando cualquier forma de violencia. El hecho de que estas agresiones se produzcan a las puertas de la institución que representa al pueblo capitalino refleja la urgente necesidad de retomar el camino del entendimiento y el respeto mutuo.
El Congreso de la Ciudad de México tiene ante sí el reto de garantizar la seguridad y bienestar de todos sus integrantes, así como de reforzar su papel como garante del diálogo y la democracia. La agresión contra el diputado Macedo Escartín es un recordatorio de que la paz es frágil, pero también una oportunidad para reafirmar los valores que hacen grande a una nación.