Aguascalientes eleva a rango constitucional las corridas de toros, charrería y peleas de gallos

Por Juan Pablo Ojeda

 

A unos días del arranque de la Feria Nacional de San Marcos, el Congreso del Estado de Aguascalientes aprobó una reforma que ha encendido tanto aplausos como polémicas: elevar a rango constitucional estatal las corridas de toros, la charrería y las peleas de gallos, reconociéndolas como patrimonio cultural inmaterial del estado.

Con 26 votos a favor de legisladores del PAN, PRI, PRD, Morena y Movimiento Ciudadano, el dictamen fue respaldado con argumentos que giran en torno a la importancia histórica, artística, económica y cultural de estas expresiones populares. La propuesta fue impulsada por integrantes del grupo parlamentario del PAN y de Fuerza por Aguascalientes.

“El propósito es promover, proteger y difundir estas prácticas que forman parte de nuestra identidad como hidrocálidos, y que representan un legado vivo dentro de la Feria Nacional de San Marcos”, señalaron los legisladores.

El documento legislativo enfatiza que estas actividades —además de su valor simbólico y tradicional— generan empleos, derrama económica y, según se argumenta, hasta protección del medio ambiente, al mantener vivas prácticas agropecuarias ligadas a estas tradiciones.

Esta decisión del Congreso local se da en un contexto nacional complejo, pues contrasta con lo sucedido recientemente en la Ciudad de México, donde se prohibieron las corridas de toros con violencia. La medida capitalina desató reacciones legales, protestas de aficionados y promotores, y un debate nacional sobre los límites entre tradición y derechos de los animales.

La Feria Nacional de San Marcos, que está por comenzar, será el primer escenario donde esta reforma tenga presencia activa, ya que las tres actividades mencionadas forman parte esencial de su cartelera cultural y de entretenimiento.

Mientras algunos celebran el blindaje legal de estas expresiones como un acto de defensa cultural, otros cuestionan si en pleno 2025 debe seguir considerándose arte o cultura a actividades que involucran el sufrimiento animal. El debate está más vivo que nunca, y lo cierto es que Aguascalientes acaba de marcar un precedente nacional.

También te podría interesar