Un reciente estudio realizado por la Universidad Metropolitana de Manchester ha revelado que los jóvenes que vapean tienen una capacidad física considerablemente reducida en comparación con quienes no fuman ni vapean. En pruebas de esfuerzo físico en bicicletas estáticas, los vapeadores mostraron resultados similares a los fumadores tradicionales, destacando que el vapeo no es una alternativa más saludable al cigarrillo, al menos en términos de rendimiento físico.
La investigación, presentada en la reunión anual de la Sociedad Respiratoria Europea (ERS) en Madrid, incluyó a 60 adultos jóvenes divididos en tres grupos: no fumadores ni vapeadores, vapeadores, y fumadores. Los participantes que vapeaban o fumaban mostraron menor capacidad de ejercicio, fatiga muscular más temprana y problemas respiratorios durante las pruebas. Según el Dr. Azmy Faisal, autor principal del estudio, «vapear no es mejor que fumar» en lo que respecta a la salud cardiovascular y pulmonar.
Además, el estudio reveló que tanto vapeadores como fumadores presentaban niveles elevados de lactato en la sangre, un indicador de fatiga muscular, y una función arterial reducida en comparación con los participantes que no consumían nicotina. Estas conclusiones refuerzan la necesidad de una mayor regulación del vapeo y la creación de políticas públicas para proteger a los jóvenes.