En una reciente conferencia de prensa, Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta electa de México, exigió una investigación exhaustiva por parte de la Fiscalía General de la República (FGR) en relación con las acusaciones de Ismael ‘El Mayo’ Zambada. Según Zambada, habría habido una reunión en la que participaron Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa; Héctor Melesio Cuén, diputado federal electo, y elementos de seguridad pública que supuestamente ofrecieron protección al narcotraficante.
Sheinbaum coincidió con el presidente Andrés Manuel López Obrador en la necesidad de “transparencia” sobre la detención de Zambada y los detalles sobre la participación de agentes en grupos delictivos. La próxima presidenta electa pidió claridad en la investigación sobre cómo se llevó a cabo la detención de Zambada, cuya versión oficial sugiere que fue emboscado y trasladado a Estados Unidos en contra de su voluntad.
Aunque Sheinbaum solicitó una investigación profunda, enfatizó que no existen vínculos entre su movimiento y el crimen organizado. Aclaró que Morena no tiene conexiones con delincuentes de cuello blanco ni con grupos delictivos, en respuesta a los constantes rumores sobre supuestos nexos entre operadores de su partido y el Cártel de Sinaloa.
“Es fundamental que la FGR llegue al fondo del asunto y que se investigue a fondo la participación de cualquier persona involucrada, ya sea en la muerte del exrector de la Universidad de Sinaloa (Melesio Cuén) o en otros casos relacionados”, declaró Sheinbaum. “Nuestro movimiento no tiene relaciones de complicidad con ningún tipo de delincuencia”.
En apoyo a Rocha Moya, gobernadores y dirigentes estatales electos de Morena emitieron un desplegado en el que califican los señalamientos de Zambada como “falsos” y aseguran que se trata de una campaña para desprestigiar al movimiento. En el comunicado, se defendió al gobernador de Sinaloa, afirmando que ha cumplido sus funciones con integridad.
Rocha Moya también se defendió, afirmando que en el día de los hechos relacionados con la detención de Zambada y el asesinato de Cuén, él se encontraba de vacaciones en Los Ángeles.