No estuvo Delfina, sino sus asesores a través de ella
La campaña electoral de Delfina Gómez no será recordada como una de las más notables, en la historia política del país. De hecho, pasará al olvido. Morena y su candidata no trabajaron para conquistar el voto de los mexiquenses; lo hicieron para administrar una supuesta ventaja de dos dígitos que le daban las encuestas, algunas de ellas amañadas. En menos de una semana, se sabrá si tuvieron éxito.
El equipo de campaña morenista utilizó las encuestas como propaganda política. Hasta este domingo, informó que mantienen su ventaja de 20 puntos sobre la candidata de la coalición, Alejandra del Moral. De mantener los dos dígitos se podría decir que tuvieron éxito; pero si llega a un dígito, se considerará como un fracaso de su estrategia política cautelosa. Ni qué decir ante una eventual derrota en las urnas.
En su idea de no trabajar para ganar, sino para no perder, al final de esta campaña, se percibe una Delfina temerosa, débil, sin entereza y fácil de manipular. Horacio Duarte, coordinador de campaña, e Higinio Martínez, delegado especial, la blindaron mucho, pero no la dotaron de un mensaje político, que trascendiera en la opinión pública.
Hay una imagen que sintetiza la campaña de Delfina. En el segundo debate, Alejandra le preguntó si reconocerá los resultados de la elección. No hubo respuesta, durante la transmisión. A la salida, una reportera insiste: “¿reconocerá los resultados?”. La morenista se hace la desentendida. Duarte sale al quite y dice: “si vamos a ganar, claro que los vamos a reconocer”. La candidata reacciona y, entonces, con una sonrisa hace suyas las palabras de su coordinador de campaña: “vamos a ganar”. En la campaña, no vimos a Delfina, sino a sus asesores a través de ella.
A diferencia de Morena, las elecciones no se ganan con las encuestas. Y a pesar de que los morenistas centraron su campaña con la difusión de las encuestas, cabe recordar que la ciudadanía quiera pensar por sí misma y no se adhiere a opiniones prefabricadas.
Sin embargo, Alejandra del Moral entró en el juego de Morena, en la narrativa de las encuestas. En distintos momentos, refirió que se acortaron las distancias. A dos semanas de las elecciones, subrayó que “candidata que alcanza gana”. Este fin de semana, dijo que ya estaba arriba. Con ello, validó las encuestas y fortaleció la estrategia morenista.
Equipo de comunicación, sin comunicación
A diferencia de la campaña de hace seis años, Delfina Gómez careció de un equipo de comunicación eficiente. Abelardo Martín Miranda, responsable de comunicación en 2017, jugó un papel importante para posicionar a la entonces candidata y su mensaje, en medios de comunicación, locales y de la Ciudad de México. En esta ocasión, además de muchos no supieron quien encabezó el staff de comunicación, el trabajo dejó mucho que desear.
En el periodismo, solían decir: “perdiste la nota en la máquina”, para referir que dejaron fuera lo más importante del discurso o de un hecho. En esta campaña, no tomaron en cuenta frases importantes o las ideas fuerza de su candidata, pero eso sí, se empeñaron en escribir en todos los párrafos “la maestra Delfina Gómez” o “la candidata de Morena, PT y PVEM a la gubernatura del Estado de México”.
Esta frase es la que destacaron en el boletín del cierre de campaña de la morenista en Toluca: «Esta ha sido una campaña hermosa, llena de amor y esperanza… Me paro aquí frente a ustedes con la satisfacción de haber recorrido los 125 municipios del Estado de México».
Más adelante redactaron: “En su discurso, la maestra Delfina Gómez, candidata a gobernadora del Estado de México, aseguró que ya se acerca el momento de ganar la gran batalla maestra en la elección que se celebrará el próximo 4 de junio. ‘Cuanta alegría, amor, participación y compromiso del pueblo mexiquense hemos visto en esta campaña, se ha demostrado que estamos preparados para hacer todo lo posible por luchar por un mejor Estado de México’, aseguró la maestra Delfina Gómez”.
En los chats de periodistas, al menos de la Ciudad de México, el equipo de comunicación de Alejandra del Moral envió boletines, transcripción de discursos, fotografías, audios y videos de todos sus eventos. Los de Delfina Gómez, si acaso, algunas fotografías y sus boletines, muchos de ellos con errores ortográficos y de redacción.
Mucho trabajo, si gana Delfina
Lo cierto es que, de ganar, Delfina Gómez tendrá mucho trabajo para mejorar su imagen. Quedó maltrecha por el blindaje de Horacio Duarte e Higinio Martínez, de su equipo de comunicación, pero sobre todo de sus errores y los escándalos como presidenta municipal de Texcoco y secretaria de Educación.