Estados Unidos a 7 de octubre, 2024.- El expresidente y candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, ha intensificado su retórica proteccionista, prometiendo imponer un arancel del 200% a los vehículos importados desde México si regresa a la Casa Blanca. Durante un mitin en Wisconsin, Trump dejó claro que no permitirá que los autos fabricados en México ingresen al mercado estadounidense sin enfrentar fuertes barreras arancelarias.
Este anuncio duplica la propuesta inicial del candidato, quien previamente había prometido un arancel del 100% con el objetivo de reforzar la industria automovilística de Estados Unidos. «Si es necesario, pondremos un arancel del 200% a los autos de México. No vamos a dejar que esos autos entren en Estados Unidos», declaró Trump ante una multitud de seguidores en un aeropuerto de Juneau.
Esta postura refleja la importancia que Trump está dando a los estados clave como Wisconsin, Michigan y Pensilvania en las elecciones de noviembre, ya que estos estados fueron fundamentales para su victoria en 2016 y para la de Joe Biden en 2020. Sin embargo, las encuestas actuales muestran a la demócrata Kamala Harris con una ligera ventaja en Wisconsin, un hecho que ha llevado a ambos candidatos a invertir tiempo y recursos en estas regiones.
México es uno de los mayores exportadores de vehículos a Estados Unidos, con alrededor de 3 millones de autos enviados en 2023, y cualquier cambio en las políticas comerciales podría tener un fuerte impacto en ambos países. Los expertos del Tax Policy Center advierten que un arancel de este tipo elevaría considerablemente los costos de los vehículos, tanto nacionales como importados, afectando a los consumidores estadounidenses.
La industria automotriz ya ha expresado su preocupación por este tipo de medidas. En 2019, los fabricantes de automóviles señalaron que un arancel del 25% sobre los vehículos y componentes mexicanos tendría un impacto negativo en la industria, elevando los precios y afectando a la competitividad del sector.
Mientras Trump continúa su campaña con mensajes de fuerte contenido económico y proteccionista, el impacto de sus propuestas sobre el comercio internacional y la industria automovilística sigue siendo un tema crucial de debate en las elecciones de noviembre.