La trofología, aunque no es un término familiar para muchos, juega un papel crucial en nuestra salud y bienestar general. Eduardo Espinola, un destacado nutricionista especializado en esta rama de la Medicina Integral, nos introduce en el fascinante mundo de la trofología, destacando su importancia no solo en la nutrición y alimentación, sino también en la eficiencia de nuestra digestión. Según Espinola, el secreto para una nutrición eficiente no radica tanto en la cantidad de lo que comemos, sino en la calidad, combinación, y el orden en que consumimos los alimentos.
La trofología, definida como la ciencia de la selección, combinación, preparación, y dosificación de alimentos, busca armonizar el pH del cuerpo a través de una alimentación adecuada, asegurando así la obtención de los nutrientes necesarios para mantener una salud óptima. Esta práctica se basa en la idea de que la calidad de nuestra salud está directamente ligada a la calidad de los alimentos que consumimos, una noción respaldada por Donato de la O, pionero en la introducción de la trofología en México.
Los preceptos fundamentales de la trofología giran en torno a la selección de alimentos frescos, la priorización de alimentos crudos sobre los cocidos, y la evitación de alimentos ultraprocesados. Este enfoque se concentra en preservar las enzimas activas en los alimentos frescos, cruciales para una digestión óptima y la absorción de nutrientes.
Eduardo Espínola amplía estos principios, subrayando la importancia de cómo se combinan los alimentos. Por ejemplo, sugiere evitar combinar carbohidratos con proteínas y recomienda consumir ensaladas y vegetales crudos al inicio de las comidas para facilitar la digestión. Esta estrategia no solo mejora la absorción de nutrientes sino que también previene problemas de fermentación o indigestión.
La trofología también advierte sobre los efectos de una mala combinación de alimentos, que pueden desencadenar inflamación y desequilibrios en el microbioma intestinal, contribuyendo al desarrollo de enfermedades digestivas y autoinmunes. La respuesta a por qué ciertos alimentos no deben combinarse se encuentra en el impacto que tienen en el pH del cuerpo. Mientras que los alimentos procesados tienden a acidificar el cuerpo, una adecuada combinación de alimentos naturales puede ayudar a mantener un equilibrio alcalino-acídico saludable.
En resumen, la trofología ofrece un enfoque holístico para la salud, enfatizando que no se trata de adherirse a una dieta estricta, sino de tomar conciencia sobre cómo combinamos los alimentos. Haciendo pequeños cambios en nuestra alimentación y estilo de vida, podemos cosechar grandes beneficios para nuestra salud a largo plazo. Al final, como bien dijo Hipócrates: «Que la comida sea tu alimento, y que tu alimento sea tu medicina».