CDMX a 14 de marzo, 2024.- En una noche llena de emociones y revueltas futbolísticas, el Estadio Azteca se convirtió en el escenario de un clásico mexicano que quedará en la memoria de los aficionados. Las Chivas de Guadalajara lograron imponerse con un marcador de 2-3 ante las Águilas del América en los octavos de final de la Concacaf Champions Cup, pero este triunfo resultó ser insuficiente para avanzar a la siguiente etapa del torneo. A pesar de la victoria del «rebaño sagrado», el marcador global de 5-3 a favor del América puso fin al sueño guadalajarense de continuar en la competencia.
Desde el comienzo del partido, las Chivas sorprendieron al conjunto local y a los aficionados. Cade Codwell abrió el marcador al minuto ’12, sembrando esperanza en el equipo visitante. La presión continuó y al minuto ’32, Ricardo Marín amplió la ventaja, dejando claro que el Guadalajara no iba a ceder fácilmente. Sin embargo, el América no se quedó atrás y, gracias a un autogol de Alan Mozo al minuto ’51, comenzó su remontada. Alejandro Zendejas y Roberto Alvarado contribuyeron con goles al ’60 y al ’63 respectivamente, demostrando la resiliencia y la calidad del equipo de Coapa.
El resultado final deja una sensación agridulce para las Chivas, que a pesar de haber conseguido una victoria en el templo del fútbol mexicano, no lograron el objetivo de clasificar a los cuartos de final de la Concachampions. Por otro lado, el América celebra su pase a la siguiente ronda, reafirmando su posición como uno de los equipos más fuertes de la competición.
Este encuentro no solo fue un clásico por la rivalidad histórica entre ambos equipos, sino también por la intensidad y la pasión mostrada en el campo. Los aficionados de ambos clubes vivieron una montaña rusa de emociones, desde la sorpresa inicial hasta la tensión de los minutos finales.