El pasado 14 de septiembre, una mujer alemana de 30 años perdió la vida en las Islas Canarias tras ser atacada por un tiburón mientras navegaba hacia el sur desde Gran Canaria. La trágica situación se desarrolló cuando el tiburón le arrancó una pierna con un mordisco, según informaron las autoridades policiales.
Tras el ataque, los guardacostas de Gran Canaria reaccionaron de inmediato, desplazándose a la zona afectada, ubicada a 514 kilómetros al sur de la isla. Utilizando un helicóptero, lograron evacuar a la víctima de la embarcación dañada. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos heroicos, la mujer falleció a causa de las graves heridas sufridas durante el traslado en el helicóptero.
Los ataques de tiburón, aunque dramáticos, son eventos extremadamente raros a nivel mundial. El Archivo Internacional de Ataques de Tiburón (ISAF) del Museo de Historia Natural de Florida registró solo 14 muertes relacionadas con tiburones en todo el mundo durante el año 2023. En España, estos incidentes son aún más inusuales, con solo seis casos confirmados a lo largo de la historia, según el mismo archivo.
Las especies de tiburones que pueden llegar a atacar a seres humanos son pocas y, generalmente, no buscan activamente presas de tamaño humano. Este trágico suceso subraya la rareza de tales ataques, aunque resalta la necesidad de mantener precauciones en actividades marinas.
Las autoridades canarias han iniciado una investigación para determinar las circunstancias exactas del ataque y evaluar posibles medidas preventivas futuras. Mientras tanto, la comunidad internacional lamenta la pérdida de la joven alemana, destacando la valentía de los guardacostas que intentaron salvar su vida en medio de una situación de emergencia.