Veracruz a 23 de septiembre, 2024.- Durante su más reciente visita a la capital de Veracruz, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue recibido por manifestantes del Poder Judicial, quienes expresaron su rechazo a la reforma judicial impulsada por su administración. La manifestación coincidió con la ceremonia de inauguración de las obras de la Casa Benito Juárez y el Centro Cultural Leyes de Reforma, dos importantes proyectos en la región.
Los trabajadores del Poder Judicial no ocultaron su descontento, lanzando consignas como “¡Dictador, dictador!” y “¡el Poder Judicial está de pie, está de pie!”, mostrando su rechazo a las recientes reformas que afectan directamente al sector. Estas modificaciones, que ya están vigentes, han sido motivo de polémica, generando preocupación entre jueces, magistrados y otros trabajadores judiciales, quienes temen por la autonomía y estabilidad de sus puestos.
Mientras el presidente caminaba por las calles acompañado por el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, un manifestante lanzó una botella de agua que no llegó a impactar a López Obrador. El equipo de seguridad del presidente, conocido como Ayudantía, intervino rápidamente, pero el incidente no detuvo al mandatario, quien continuó su camino hacia el recinto entre gritos tanto de protesta como de apoyo.
Por un lado, los manifestantes del Poder Judicial exigían respeto y rechazaban las reformas, mientras que los simpatizantes de AMLO coreaban “¡Es un honor estar con Obrador!” en respaldo al presidente. En respuesta, López Obrador alzó los puños en señal de victoria y saludó a los asistentes.
Antes de la llegada de los funcionarios, se vivieron momentos de tensión cuando los manifestantes del Poder Judicial se enfrentaron con supuestos simpatizantes del partido Morena. Hubo empujones, gritos y confrontaciones, lo que evidenció la polarización existente en torno a las políticas del gobierno federal.
La reforma judicial promovida por López Obrador ha sido uno de los temas más controversiales de su administración. Mientras que el gobierno asegura que busca combatir la corrupción y mejorar el acceso a la justicia, muchos dentro del Poder Judicial temen que estas medidas puedan socavar la independencia de la justicia en el país.
La reforma ha generado intensos debates en los últimos meses. Entre los puntos más discutidos está la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular, una medida que ha sido señalada como un riesgo para la imparcialidad de las decisiones judiciales. Los trabajadores judiciales han organizado varias protestas a nivel nacional, y la manifestación en Veracruz es solo una muestra del descontento que se vive en el sector.
Mientras tanto, López Obrador sigue defendiendo sus políticas, argumentando que la reforma busca poner fin a privilegios y garantizar una justicia más accesible para todos los mexicanos.