CDMX a 25 de agosto, 2024.- En medio de un tenso foro organizado por Morena en Yucatán, trabajadores del Poder Judicial de la Federación confrontaron a la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Loretta Ortiz, por su promoción de la reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Esta reforma, que propone la elección de jueces, magistrados y ministros a través de votaciones populares, ha generado controversia y polarización entre diversos sectores del país.
Durante su exposición sobre la reforma, Ortiz fue interrumpida por trabajadores judiciales quienes expresaron su descontento con las propuestas del presidente. «Yo no les estoy mintiendo sin justicia… yo tengo asuntos que se han demorado», mencionó la ministra Ortiz antes de ser interrumpida por los asistentes. Uno de los manifestantes replicó, «Todo lo que está diciendo… me duele que mienta así», en un momento que quedó registrado en un video que rápidamente se difundió en redes sociales.
Los trabajadores señalaron que los retrasos en los asuntos judiciales no recaen en los juzgados, como argumentó Ortiz, sino en las fiscalías y ministerios públicos. En defensa, Ortiz respondió: «No miento, no tengo por qué mentir, llevo 44 años dando clase», tratando de calmar los ánimos durante el acalorado intercambio.
La reforma judicial presentada por López Obrador el pasado 5 de febrero ha sido objeto de un intenso debate. Esta iniciativa busca modificar la forma en que se eligen a los integrantes del Poder Judicial, proponiendo que jueces, magistrados y ministros sean elegidos mediante el voto popular. La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados dictaminará la reforma el 26 de agosto, con la intención de llevarla al pleno el 1 de septiembre, coincidiendo con el inicio de la 66ª Legislatura del Congreso.
A pesar de la conclusión de los foros de diálogo organizados por los diputados, Morena ha continuado promoviendo la reforma a través de foros de debate, argumentando que una elección popular podría democratizar el Poder Judicial y mejorar su imparcialidad.
Los trabajadores del Poder Judicial han expresado fuertes críticas a la reforma, temiendo que la elección de jueces y magistrados a través de votaciones pueda politizar aún más el sistema judicial, comprometiendo su independencia. Además, argumentan que los problemas actuales de la justicia en México no se deben a la forma en que se eligen los jueces, sino a la falta de recursos y la ineficiencia en las fiscalías y ministerios públicos.
Por su parte, Loretta Ortiz ha defendido la reforma, señalando que su objetivo es acercar la justicia a la gente y mejorar la confianza en las instituciones. Sin embargo, su confrontación con los trabajadores judiciales en Yucatán refleja el desafío que enfrenta la propuesta para ganar aceptación entre quienes laboran dentro del sistema judicial.
A medida que se acerca la fecha de votación en el Congreso, las posiciones sobre la reforma judicial siguen polarizadas. Mientras que Morena y sus aliados continúan promoviendo la propuesta como un paso hacia una justicia más democrática, los críticos, incluyendo a muchos dentro del propio Poder Judicial, la consideran un riesgo para la independencia judicial.
Con la discusión en el pleno programada para el 1 de septiembre, el futuro de la reforma y su impacto en la justicia mexicana sigue siendo incierto.