Por Juan Pablo Ojeda
La madrugada de este lunes, un tiroteo a bordo de un vagón del metro de Chicago dejó un saldo trágico de cuatro personas muertas. Las autoridades locales informaron que el tiroteo ocurrió alrededor de las 5:30 a.m. mientras el tren se dirigía hacia Forest Park, una zona del oeste de la ciudad.
El caos comenzó cuando la policía recibió una llamada que alertaba sobre tres personas heridas por balas en un tren en la estación de la Línea Azul de la CTA (Autoridad de Tránsito de Chicago). Al llegar, las autoridades encontraron a cuatro víctimas tiroteadas: tres de ellas fallecieron en el lugar, mientras que la cuarta murió más tarde en el Centro Médico de la Universidad de Loyola en Maywood, Illinois.
El sospechoso del ataque, que aparentemente había huido del lugar en otro tren, fue finalmente detenido por la policía de Chicago gracias a las imágenes capturadas por las cámaras de vigilancia. Las autoridades subrayaron que, aunque se trata de un incidente aislado, la violencia ocurrida en un transporte público es un acto «atroz y escandaloso».
4 people killed in shooting on CTA Blue Line train to Forest Park, police say
FOREST PARK, Ill. — Four people were shot and killed early Monday morning on a CTA westbound Blue Line train to Forest Park, and a suspect is in custody, the Forest Park Police Department confirmed.… pic.twitter.com/u28lelxKA5
— LockharTVMedia (@LockharTVMedia) September 2, 2024
Este trágico suceso ocurre en un contexto en el que la violencia armada en Estados Unidos sigue siendo un problema grave. Según el Gun Violence Archive, hasta la fecha se han registrado 11,463 muertes por armas de fuego en el país, además de 22,027 heridos.
El tiroteo en el metro de Chicago resalta una vez más la urgencia de abordar la violencia armada en Estados Unidos y las implicaciones de seguridad en el transporte público. La investigación sigue en curso mientras la comunidad de Chicago y el país entero buscan respuestas y medidas para prevenir futuros incidentes similares.