Por Juan Pablo Ojeda
En un nuevo capítulo de su batalla legal en Estados Unidos, TikTok ha solicitado a la Corte de Apelaciones de Washington que paralice la ley que podría llevar a la prohibición de la popular red social en el país. La solicitud llega en un momento crucial, mientras se espera que la nueva Administración del presidente electo Donald Trump, y eventualmente el Tribunal Supremo, revisen el caso que involucra a la plataforma y su empresa matriz, la china ByteDance.
La ley, aprobada por el Congreso de Estados Unidos en abril, impone a TikTok la obligación de desvincularse de ByteDance o enfrentarse a la prohibición de la aplicación en el país a partir de enero de 2025. Ante la posibilidad de enfrentar consecuencias graves e irreparables, TikTok ha solicitado que la Corte conceda una medida cautelar para detener la ejecución de la ley hasta que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre el caso.
Argumentos de TikTok para la suspensión de la ley
En su solicitud, la plataforma de videos argumenta que una paralización de la ley no generaría perjuicios significativos. TikTok sostiene que no existe una amenaza inminente a la seguridad nacional, ya que el Congreso ha acordado retrasar la fecha de entrada en vigor de la ley, lo que deja tiempo para una revisión más profunda del caso. Además, la red social destaca que la ley no establece pruebas de que China haya llevado a cabo o esté llevando a cabo actividades perjudiciales a través de TikTok, sino que simplemente afirma la posibilidad de que el Gobierno chino pueda usar la plataforma para sus intereses.
La ley, que TikTok busca que se suspenda, otorga a ByteDance un plazo de nueve meses (hasta el 19 de enero) para encontrar un inversor de un país que no sea considerado un “adversario” de Estados Unidos, con el fin de vender sus operaciones en el país. En caso de no lograrlo, la aplicación tendría que dejar de operar en Estados Unidos. Este plazo tiene una fuerte carga simbólica, ya que coincide con el último día de la Administración de Joe Biden, quien concluirá su mandato el 20 de enero, un día antes de la investidura de Donald Trump como presidente electo.
El futuro de TikTok bajo la Administración de Trump
La solicitud de TikTok ante la Corte de Apelaciones también hace referencia al cambio de Administración en la Casa Blanca, argumentando que la paralización de la ley permitiría al presidente entrante, Donald Trump, tener tiempo para determinar su postura sobre el asunto. Durante su campaña electoral, Trump manifestó su intención de «salvar a TikTok en Estados Unidos», aunque no ha emitido comentarios oficiales desde su victoria en las elecciones presidenciales del pasado noviembre.
Este enfrentamiento legal se deriva de las preocupaciones de seguridad nacional que motivaron a la Administración de Biden y a congresistas de ambos partidos, Demócrata y Republicano, a aprobar la ley. La legislación busca mitigar el riesgo de que el Gobierno chino pueda obtener información sensible sobre los usuarios de TikTok en Estados Unidos y usar la plataforma para influir en la opinión pública estadounidense manipulando los contenidos que los usuarios ven.
La batalla legal por TikTok: Un conflicto de seguridad y política internacional
El caso de TikTok se ha convertido en una pieza clave en la relación entre Estados Unidos y China, particularmente en el contexto de la creciente rivalidad entre ambas naciones. Si bien la red social continúa defendiendo su integridad y la privacidad de sus usuarios, el miedo a la influencia china en las plataformas digitales sigue siendo un tema candente en la política de Washington.
A medida que el futuro de TikTok en Estados Unidos pende de un hilo, la corte deberá decidir si concede la medida cautelar solicitada, lo que podría abrir la puerta a una revisión más profunda por parte de la nueva Administración y, eventualmente, del Tribunal Supremo. Mientras tanto, la batalla legal sigue siendo un reflejo de las tensiones geopolíticas y de seguridad que definen la relación entre las dos superpotencias.