El Comité Olímpico Internacional (COI) ha aceptado la renuncia de Thomas Bach como presidente y miembro de la Junta Ejecutiva, efectiva a partir del 23 de junio. Bach, campeón olímpico de esgrima en Montreal 1976, anunció su decisión de no buscar una extensión de su mandato, a pesar de las peticiones de los miembros del COI. Su salida marca el final de una década al frente del organismo, tras ser elegido por primera vez en 2013 y reelegido en 2021.
El proceso para elegir a su sucesor ya está en marcha. El próximo 20 de marzo, en Costa Navarino, Grecia, se decidirá quién tomará las riendas del COI. Entre los candidatos destacan figuras como el español Juan Antonio Samaranch Salisachs, hijo del expresidente del COI, y otros nombres como el británico Sebastian Coe, la zimbabuense Kirsty Coventry y el francés David Lappartient.
Bach, quien lideró el COI durante momentos clave como los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (celebrados en 2021 debido a la pandemia), deja un legado marcado por reformas y desafíos globales. Su decisión de no prolongar su mandato abre un nuevo capítulo para el movimiento olímpico, en un contexto de cambios y expectativas.
