Por Juan Pablo Ojeda
En un inusitado intercambio en el Despacho Oval de la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, se enfrentaron durante una rueda de prensa. La discusión se tornó tensa cuando el vicepresidente J.D. Vance intervino de manera directa, acusando a Zelenski de faltar al respeto a los medios estadounidenses y de usar su visita para fines propagandísticos.
El enfrentamiento comenzó cuando Vance criticó a Zelenski por los problemas que enfrentaba Ucrania para reclutar soldados, mientras que el líder ucraniano se mostró calmado, respondiendo que «todo el mundo tiene problemas» en tiempos de guerra. Sin embargo, las palabras de Zelenski, que sugerían que Estados Unidos sentiría los problemas de Ucrania en el futuro, no fueron bien recibidas por Trump. El presidente estadounidense respondió en tono severo, advirtiendo a Zelenski que no está en posición de dictar lo que los Estados Unidos deben sentir. “No estás en una buena posición ahora. Has permitido estar en una mala posición”, insistió Trump, quien incluso acusó al presidente ucraniano de estar jugando con la vida de millones de personas y con el riesgo de una Tercera Guerra Mundial.
Trump también le recriminó a Zelenski que no haya expresado suficiente agradecimiento por la ayuda estadounidense, haciendo referencia a su visita a una fábrica de municiones en Pensilvania en medio de la campaña presidencial. El exmandatario incluso aseguró que Ucrania «está en muchos problemas», advirtiendo que las negociaciones futuras serían complicadas si no se cambiaban ciertas actitudes.
President Donald J. Trump and Vice President JD Vance put AMERICA FIRST. pic.twitter.com/AkAvzKpcpb
— The White House (@WhiteHouse) February 28, 2025
Zelenski intentó apaciguar la tensión, afirmando que ya había mostrado su gratitud en diversas ocasiones y explicando que, en su rol como presidente de un país en guerra, no se concentraba en las cartas que tenía en la mesa, sino en las decisiones que debía tomar. No obstante, Trump no dudó en recordarle que, gracias a Estados Unidos, Zelenski tenía el poder de ser «un tipo duro», insinuando que sin la ayuda de su país, Ucrania no estaría en la misma posición.
La reunión, que originalmente iba a culminar con un almuerzo y una rueda de prensa conjunta, se vio empañada por este intercambio verbal. Además, el encuentro se había planeado para firmar un acuerdo entre ambos países, en el que Ucrania compartiría el 50% de los ingresos derivados de sus recursos naturales, como parte de un compromiso hacia un futuro pacto de paz con Rusia. Este acuerdo ha levantado varias suspicacias en Kiev, al considerar que podría poner en duda la soberanía económica del país.
