Ciudad de México, 16 de junio de 2023.- El síndrome de Ekbon es un conjunto de síntomas denominados calambres o parestesia generalizada, que se presentan predominantemente, aunque no exclusivamente, durante las horas de la noche. Generalmente se presenta a partir de la quinta década de la vida con una mayor representación en el sexo femenino y además resulta algo muy curioso, ya que es un síndrome del que te dice que te hace sentir como si tuvieras hormigas corriendo por el cuerpo.
Qué es el síndrome de Ekbon
El síndrome de Ekbon no se asocia necesariamente con déficits cognitivo-conductuales y sí se identifica entre las parasomnias , ya que en ocasiones se atribuye a esta condición el llamado síndrome de piernas inquietas . De hecho, según la clasificación más reciente de los trastornos del sueño, las parasomnias representan un grupo amplio y heterogéneo de trastornos del sueño que, además de reportar síndrome de piernas inquietas, también involucran pesadillas, sonambulismo, sonambulismo, rechinar de dientes y enuresis nocturna .
Aquellas personas que padecen el síndrome Ekbom creen que hay insectos que recorren incansablemente su cuerpo. Este síndrome se conoce también como delirio parasitario, delirio de infestación o parasitosis imaginaria.
De hecho, ocurre cuando el sujeto cree haber estado en contacto con algo potencialmente infectado o sucio (animales, contacto accidental con sangre o fluidos biológicos, alimentos…) y se establece un mecanismo de delirio lúcido monotemático que se basa sistemáticamente en la (absurda) creencia de estar infestado (infectado) por esos pequeños insectos que recorren su cuerpo, especialmente las piernas.
Como vemos se trata de una enfermedad psicológica que debe tratarse a conciencia porque quienes la padecen, aunque parezca algo simple, lo pasan mal y hasta pueden hacerse daño tras rascarse al notar como los insectos recorren su cuerpo.
Cómo se detecta
La verdad es que no es tan fácil de detectar, pues en el médico es algo complicado de explicar. Algunas personas suelen requerir de especialistas en plaguicidas y al ver que realmente no necesitan este servicio (porque no hay insectos en la vivienda) tanto familiares como la propia persona ven que se trata de un trastorno algo grave.
Cuando se acude al médico, al profesional sanitario, fundamentalmente especialista en dermatología, se le suele explicar, que se siente la presencia en el cuerpo, de seres inexistentes de los que se cree infestado a través del tacto ( percepción háptica ). Tanto es así que el paciente, en la creencia de que está «colonizado» por pulgas y pequeños animales, no solo refiere alucinaciones hápticas propiamente dichas, sino también alucinaciones visuales.
Cuáles son los síntomas
De este modo, y aunque temer a los insectos es algo normal, deja de serlo cuando hay una serie de requisitos, como son la presencia de delirios de un mes o más de duración. Se pueden tener posibles problemas anteriores debidos a otros trastornos psicológicos.
Las personas con síndrome Ekbom suelen tener miedo de insectos, rascarse continuamente, aplicarse cremas y otros remedios anti parásitos e ir al médico para preguntar sobre medicamentos que eliminen los insectos de su cuerpo. Viven obsesionadas con este problema y puede hacer que se encierren en si mismas, no tengan ganas de salir, no se comuniquen con los demás y desarrollar realmente un problema mayor.
Cuáles son las causas
Hay que especificar que las causas no están todavía claras y se están estudiando. Si bien hay cuestiones con temas cerebrales que pueden ser comunes en determinadas personas.
De todos modos, se supone que una combinación de factores sociales y endocrinológicos subyace a este síndrome . El inicio después de la cuarta década de la vida y en su mayoría en mujeres podría sugerir que el síndrome de Ekbon se desencadena después de la menopausia.
Un análisis de los estudios realizados muestra que condiciones como la insuficiencia renal crónica o la insuficiencia de vitamina B o la pelagra pueden ser cofactores en la aparición de la enfermedad. No se excluyen pacientes con deterioro mental o en terapia anticolinérgica, que presenten un hallazgo sintomático atribuible al síndrome de Ekbon.
Cómo se trata este síndrome
El síndrome de Ekbom debe tratarse con ayuda del profesional. Se requiere de la intervención de varios profesionales, por un lado el médico que detecta el problema y deriva al paciente a psicología o psiquiatría, así como el dermatólogo, pues puede haber heridas y problemas de este estilo en la piel.
La psicología suele ser un remedio con tratamientos personalizados para acabar con este problema, pero también se recomiendan fármacos, especialmente antipsicóticos. En casos algo más complicados se puede llegar a una severa ansiedad y depresión, a sufrir alucinaciones y llegar al suicidio.
Vía Okdiario