Ciudad de México, 10 de enero de 2023.- El comunicado oficial de Washington se basa en generalidades como el intercambio de información, cambio climático, narcotráfico, migración y salud, así como la renovación de compromisos existentes, sin profundizar en los temas, sino más bien enunciados.
Al trabajar juntos, señaló, los países de América del Norte pueden abordar mejor los desafíos compartidos, como el cambio climático, la pandemia de Covid-19 y las organizaciones criminales transnacionales que trafican y trafican personas y drogas ilícitas como el fentanilo».
«En particular, Estados Unidos, México y Canadá seguirán defendiendo la expansión de vías legales y otras medidas humanitarias para abordar la migración irregular en la región», indicó sin mencionar las propuestas mexicanas de atacar las causas del éxodo.
Añadió que los tres países profundizarán la cooperación económica, promoverán la inversión y reforzarán la competitividad, la innovación y la resiliencia, pero nada de contribuir con inversiones en los países emisores de migrantes.
Sin embargo, hizo énfasis en reconocer «la urgencia de medidas rápidas, coordinadas y ambiciosas para construir economías de energía limpia y responder a la crisis climática», evidentemente una referencia a la explotación del litio mexicano.
De acuerdo con la Casa Blanca, los líderes se comprometieron a compartir información y desarrollar políticas públicas «para proteger a nuestros países contra las crisis de salud actuales y futuras».
según el texto los participantes se comprometieron a promover sociedades diversas, inclusivas, equitativas y democráticas que combatan el racismo. Es decir, una generalidad impresionante y bien alejada de cualquier programa racional.
No hay hasta ahora reacción por esta sorprendente y desacostumbrada forma de actuar de poner la carreta delante de los bueyes, comentaron algunos periodistas que cubren la cumbre.