Ciudad de México, 27 de octubre del 2023.- En medio de la desolación que dejó el paso del huracán ‘Otis’ por territorio mexicano, la comunidad internacional ha extendido su mano en un acto de profunda solidaridad. El Sistema de Naciones Unidas en México, mediante un comunicado oficial, ha expresado su apoyo y disposición para trabajar conjuntamente con el gobierno mexicano en las labores de respuesta y reconstrucción necesarias tras los severos daños sufridos, especialmente en el puerto de Acapulco, Guerrero.
El huracán ‘Otis’, que alcanzó la categoría 5, dejó un rastro de devastación en este emblemático destino turístico, afectando al 80% de los hoteles y comercios de la zona. El saldo, hasta ahora, es trágico: más de 25 personas han perdido la vida y varias más se encuentran desaparecidas, sumiendo al país en un estado de luto y emergencia.
Ante esta situación, diferentes organismos internacionales han levantado la voz y ofrecido su respaldo. Uno de ellos es la Unión Europea, cuyo alto representante para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, comunicó la solidaridad de la UE con México, comprometiéndose a brindar apoyo en estos momentos de adversidad.
La respuesta nacional no se ha hecho esperar. Centros de acopio se han instalado a lo largo y ancho del país, buscando reunir artículos esenciales para las miles de personas afectadas en Guerrero. Entre los artículos solicitados para donación se encuentran agua embotellada, alimentos enlatados, botiquines de primeros auxilios, ropa, cobijas, productos de higiene personal, y alimentos para mascotas, una muestra de que no se ha dejado ningún detalle al azar en la atención a las necesidades básicas de los damnificados.
En una acción que refleja su compromiso con la ciudadanía, el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó personalmente Acapulco para evaluar los daños. De igual forma, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, ha estado activa en el terreno, coordinando esfuerzos para una respuesta efectiva a la crisis.
La situación demanda una acción conjunta y solidaria, en la que tanto las autoridades como la ciudadanía y la comunidad internacional juegan un papel crucial. Este desastre natural ha probado una vez más la resiliencia del pueblo mexicano y la importancia de la solidaridad y cooperación global en momentos de profunda dificultad.