Síndrome de Houdini: el arte de escapar de las relaciones
Editor web Maya Comunicación 
El síndrome de Houdini, inspirado en el famoso escapista Harry Houdini, se caracteriza por una tendencia compulsiva a evadir situaciones comprometedoras o estresantes de manera sistemática. Este comportamiento evasivo puede presentarse en diferentes aspectos de la vida, incluyendo las relaciones personales y los entornos laborales. Sin embargo, es importante destacar que no es una patología reconocida científicamente, según la Gaceta de la Universidad Autónoma de México (UNAM).
En el contexto de las relaciones de pareja, el síndrome de Houdini se manifiesta como un escapismo sentimental, muy similar al mecanismo de evitación. Según el sitio Mejor con Salud, las personas que lo padecen tienden a involucrarse rápidamente en una relación, pero a medida que aumenta el compromiso, crece también su necesidad de escapar, lo que eventualmente conduce al conocido fenómeno del ghosting.
Los profesionales que estudian las relaciones de pareja contemporáneas sugieren que estos vínculos son cada vez más difusos y débiles, con una creciente percepción de reemplazabilidad. Esto puede llevar a que las personas eviten comprometerse profundamente. El síndrome de Houdini en las relaciones de pareja puede describirse en las siguientes fases:
- Momento alto de la relación: Durante esta fase, se experimenta un enamoramiento intenso y se cree haber encontrado a la persona perfecta. Sin embargo, esta etapa es efímera.
- Dudas e inquietudes: Aquí comienzan los cuestionamientos sobre la solidez de la relación, con una creciente incertidumbre que debilita el vínculo.
- Escape emocional: Este es el punto culminante en el que la persona con síndrome de Houdini se aleja de la relación, a menudo sin previo aviso ni explicación.
Los psicólogos sugieren que el síndrome de Houdini puede estar relacionado con factores como la inmadurez emocional, el miedo al compromiso y la influencia de una sociedad individualista. Además, las nuevas tecnologías y redes sociales facilitan la percepción de múltiples parejas potenciales, lo que dificulta centrarse en una sola persona.
