El próximo 19 de septiembre a las 11:00 horas, México vivirá una nueva edición del Simulacro Nacional, un ejercicio clave para la prevención y reacción ante sismos. Este año, el simulacro será particularmente significativo, ya que por primera vez en la historia de la Ciudad de México, la alerta sísmica será emitida a través de celulares mediante mensajes SMS, un avance que busca reforzar la seguridad de los ciudadanos.
Un sismo simulado de gran magnitud
El ejercicio tendrá como hipótesis un sismo de magnitud 7.5 con epicentro en Acapulco, Guerrero, a una profundidad de 20 kilómetros. Se espera que la percepción del sismo sea severa en Guerrero y fuerte en estados cercanos como Michoacán, Morelos y Oaxaca. La participación de las 32 entidades federativas garantizará que este simulacro sea un esfuerzo nacional para reforzar la cultura de prevención.
Alerta sísmica en celulares: Un avance crucial
La gran novedad de este año es el uso del sistema Cellbroadcast, que permitirá que los ciudadanos reciban la alerta sísmica directamente en sus teléfonos móviles, sin necesidad de conexión a internet o aplicaciones adicionales. Esta herramienta fue desarrollada por la Coordinación Nacional de Protección Civil desde 2019 y tiene como objetivo garantizar que más personas estén informadas en caso de emergencia, especialmente en zonas donde antes no llegaba la alerta.
Este sistema, que funcionará por primera vez durante el simulacro, promete ser un gran paso hacia una mejor comunicación en situaciones críticas, permitiendo que las personas puedan movilizarse a lugares seguros con mayor antelación.
Preparativos y preguntas clave
Para asegurar una participación efectiva, es importante que los ciudadanos conozcan si sus dispositivos son compatibles con esta nueva tecnología y sepan qué hacer en caso de no recibir la alerta. Además, es fundamental comprender la diferencia entre la alerta en celulares y las tradicionales bocinas instaladas en la ciudad, que seguirán funcionando como hasta ahora.
Este Simulacro Nacional 2024 marca un avance hacia una mayor seguridad y preparación ante desastres naturales, con la esperanza de que la tecnología continúe siendo un aliado en la protección de todos los mexicanos.