Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reaccionó con firmeza a los comentarios del ex presidente Felipe Calderón, quien defendió su polémica decisión de declarar la «guerra contra el narcotráfico» durante su sexenio. Calderón, en una entrevista reciente, aseguró que fue una decisión difícil, pero que no se arrepiente de haber lanzado una ofensiva contra los carteles de la droga, argumentando que era necesario para frenar la creciente violencia en el país.
Sin embargo, Sheinbaum no tardó en cuestionar las consecuencias de esa decisión, calificándola de “irresponsable”. «Es una de las decisiones más irresponsables que haya tomado una persona que llegó a la presidencia a través de un fraude electoral, porque ¿quién declara la guerra en su propio país? Guerra significa permiso para matar”, sostuvo la mandataria mexicana durante su conferencia matutina.
La presidenta destacó que declarar la guerra en un país implica la suspensión de las leyes y el derecho, algo que, a su juicio, dañó gravemente a la nación. Sheinbaum refirió que la estrategia implementada por Calderón no solo resultó en un aumento de la violencia, sino que también dejó una huella de inseguridad que persiste hasta el día de hoy.
El ex presidente Calderón, por su parte, defendió su enfoque en una entrevista con Óscar Mario Beteta para El Heraldo Radio, argumentando que la lucha contra el narcotráfico con el apoyo de las Fuerzas Armadas fue una decisión ética para enfrentar la delincuencia. A pesar de las críticas, Calderón afirmó que su objetivo era frenar la violencia y proteger a la sociedad.
Sin embargo, Sheinbaum no solo cuestionó la declaración de guerra, sino también la retórica de algunos políticos actuales que acusan al gobierno mexicano de autoritarismo. “A todos aquellos que dicen, se llenan la boca en… hay autoritarismo en México y en realidad un hecho de autoritarismo es el de declarar la guerra. Escuchen bien, declarar la guerra en su propio país”, subrayó.
Además, la presidenta presentó una gráfica que evidenció los altos índices de homicidios durante los gobiernos anteriores, destacando que durante el mandato de Calderón se registraron 120,563 asesinatos, con el año 2011 siendo el más violento, con 27,213 muertes. Para Sheinbaum, estos datos reflejan el fracaso de la estrategia de seguridad del sexenio anterior.
A raíz de esto, la mandataria resaltó que una de las razones para implementar nuevas políticas de seguridad fue precisamente el fracaso de la “guerra contra el narcotráfico”. Sheinbaum mencionó que el gobierno actual ha optado por nuevas estrategias que buscan mejorar las condiciones de vida de los jóvenes y ofrecer más oportunidades de empleo y educación. “Pasamos de la hipocresía a la honestidad y de la corrupción a la honradez”, concluyó.