Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó categóricamente las acusaciones que señalan crímenes de lesa humanidad en el rancho de Teuchitlán, Jalisco, tras el hallazgo de lo que se presume es un campo de adiestramiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Activistas, opositores y colectivos de derechos humanos habían calificado el hallazgo como un «campo de exterminio del narcotráfico», señalando graves violaciones de derechos humanos y desapariciones forzadas.
En su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que «lo que hay es delincuencia organizada», rechazando la acusación de crímenes de lesa humanidad y afirmando que en el pasado, este tipo de crímenes provenían del Estado. «Eso no existe ya en México», subrayó la mandataria, destacando los esfuerzos de su gobierno para pacificar el país y reducir la violencia vinculada al crimen organizado.
La presidenta también destacó que el caso del rancho Izaguirre, situado en Teuchitlán, está siendo investigado por la Fiscalía General de la República (FGR), que tomó posesión oficial del predio. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) ha identificado el lugar como un “campo de adiestramiento” del CJNG, pero Sheinbaum insistió en que no se ha confirmado la existencia de crímenes de lesa humanidad en la zona.
Además, la mandataria firmó este jueves una serie de reformas a la Ley General de Población y a la Ley General en Materia de Desaparición Forzada, con el objetivo de crear una Plataforma Única de Identidad y un Sistema Nacional de Alerta, Búsqueda y Localización de Personas. Estas reformas buscan fortalecer las acciones del gobierno en la lucha contra las desapariciones y mejorar el apoyo a las familias afectadas.
Sheinbaum también subrayó la importancia de que las familias de personas desaparecidas participen en el proceso legislativo y en la discusión de las reformas, especialmente después de las recomendaciones emitidas por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU. A pesar de las tensiones políticas, la presidenta aseguró que su gobierno está comprometido con el diálogo y el trabajo conjunto con las organizaciones de derechos humanos.
La crisis de desapariciones en México es un tema central en la agenda política del país, con más de 120,000 personas no localizadas desde que hay registro. La polémica por el hallazgo en Teuchitlán ha elevado la presión sobre el gobierno de Sheinbaum para que se tomen medidas más contundentes en la atención de este grave problema.