Por Juan Pablo Ojeda
Desde octubre de 2024, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, adelantó una iniciativa que busca frenar el nepotismo en la política mexicana. La propuesta, que se incluye en una reforma electoral, tiene como objetivo evitar que los familiares de los presidentes municipales o gobernadores se postulen para el mismo cargo inmediatamente después de que sus parientes terminen su mandato.
Durante su conferencia matutina del 24 de octubre, Sheinbaum explicó que esta reforma pretende recuperar los principios fundamentales establecidos en la Constitución de 1917, los cuales promueven la igualdad y la democracia. En este sentido, detalló que el cambio impediría que, por ejemplo, un presidente municipal que finaliza su mandato entregue su puesto a un familiar o persona cercana, asegurando que, si los familiares desean participar en futuras elecciones, lo hagan basándose en su propio esfuerzo y no por el beneficio de su parentesco.
La presidenta también aclaró que este tipo de medidas, que buscan erradicar la práctica del nepotismo, no afectan la posibilidad de que un miembro de la misma familia ocupe un cargo público en el futuro, pero sí restringen la sucesión directa de un familiar en el mismo puesto.
Además, Sheinbaum aprovechó para referirse a los recientes casos en Veracruz, donde se han registrado denuncias de nepotismo por parte de autoridades locales que estarían promoviendo a familiares para cargos públicos. “El objetivo de la reforma es que un presidente municipal que termina su cargo no deje en funciones a sus familiares o personas cercanas, ese es el objetivo”, expresó.
El nepotismo, que se refiere al favoritismo hacia familiares o amigos cercanos en la asignación de cargos, ha sido una práctica frecuente en diversos gobiernos del país, tanto en administraciones de Morena como en otras formaciones políticas. En el caso reciente de la Ciudad de México, el nombramiento de Bertha María Alcalde Luján como titular de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) en diciembre de 2024 generó controversia debido a su parentesco con figuras clave del partido Morena, como su madre Bertha Luján Uranga, quien presidió el Consejo Nacional de Morena, y su hermana Luisa María Alcalde Luján, actual presidenta del partido.
El nepotismo, reconocido por organizaciones como Transparency International, puede socavar la confianza pública en las instituciones al promover la corrupción y la falta de transparencia. En respuesta a estas preocupaciones, Sheinbaum busca evitar que los ciudadanos perciban que el poder político se transmite como una especie de “herencia” familiar, afectando la competencia y los principios democráticos.
La reforma electoral que se presentará en los próximos meses será clave para redefinir el panorama político en México y fortalecer las instituciones, garantizando que los puestos de poder sean ocupados por quienes realmente tengan la capacidad y el compromiso con la ciudadanía, sin recurrir al favoritismo familiar.