CDMX a 11 de abril, 2025.- Por primera vez en la historia de México, la ciudadanía tendrá la posibilidad de votar directamente por jueces, magistrados y ministras de la Suprema Corte. Y ahora, con la autorización del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), los funcionarios y gobiernos podrán promover abiertamente este proceso.
Durante un acto conmemorativo por el aniversario luctuoso de Emiliano Zapata, en Morelos, la presidenta Claudia Sheinbaum no perdió tiempo y lanzó un llamado contundente: “¡Vamos a votar!”. La frase, que pronunció con entusiasmo frente a simpatizantes, da inicio a una etapa donde el Poder Ejecutivo y otros actores gubernamentales podrán difundir y promover la participación en los comicios judiciales.
“Como por una semana me pusieron un ‘zipper’ para no hablar de la elección a jueces, magistrados, magistradas, ministros, ministras… pero ahora sí, ¡vamos a votar!”, expresó Sheinbaum.
El próximo 1 de junio será la primera ocasión en que los ciudadanos podrán participar en la elección directa del Poder Judicial. Esta reforma, impulsada por el gobierno federal, busca combatir la corrupción dentro del sistema judicial, un reclamo constante de diversos sectores sociales.
«¿Quién puede sanear al Poder Judicial? El pueblo de México, nadie más puede sanearlo. Eso quiere decir: con el pueblo, todo; sin el pueblo…», dijo Sheinbaum, retomando frases clásicas del movimiento de la Cuarta Transformación.
Con una votación dividida, la Sala Superior del TEPJF aprobó que tanto gobiernos estatales como el federal, así como funcionarios de los tres Poderes de la Unión, puedan participar en la promoción del proceso. Eso sí, con reglas claras:
- No podrán condicionar programas sociales
- No podrán difundir propaganda personalizada
- No se permitirá desinformar o hacer uso indebido de recursos públicos
Esto rompe con el modelo tradicional donde únicamente el Instituto Nacional Electoral (INE) tenía permitido promover la participación ciudadana.
Durante su discurso, la presidenta también habló de economía, del “humanismo mexicano” y del legado agrario de Emiliano Zapata. Desde la ex Hacienda de Chinameca, prometió seguir defendiendo a los ejidos y comunidades con enfoque en la equidad, paz y relevo generacional.
“Nos proponemos rescatar y revalorizar los ejidos. La economía mexicana se riega desde abajo, eso es Humanismo Mexicano”, expresó.