Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, lamentó profundamente el asesinato de la madre buscadora María del Carmen Morales y su hijo Jaime Daniel Ramírez Morales, ocurrido en el municipio de Tlajomulco, Jalisco, y exigió que el caso sea investigado a fondo por las autoridades estatales.
“Es muy lamentable, nuestra solidaridad a todos los familiares de personas desaparecidas y en particular este trágico acontecimiento”, expresó la mandataria en su conferencia matutina desde Palacio Nacional. Agregó que no se puede descartar ninguna línea de investigación y pidió que no se deseche de inmediato la posibilidad de que los homicidios estén relacionados con la labor de búsqueda de desaparecidos.
Sheinbaum informó que la subsecretaría de Derechos Humanos del Gobierno Federal ya estableció contacto con los familiares de las víctimas para brindar acompañamiento y apoyo en este difícil momento.
La tragedia fue confirmada por el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, al que pertenecía María del Carmen, a través de un comunicado en redes sociales. De acuerdo con la información compartida, los asesinatos ocurrieron en el fraccionamiento Las Villas, en la localidad de Santa Cruz del Valle, Tlajomulco.
El colectivo exigió a las autoridades estatales y federales una investigación transparente y rápida que conduzca al esclarecimiento del crimen. “Es hora de que las autoridades tomen medidas efectivas para proteger a los ciudadanos y garantizar la justicia”, expresaron con indignación.
Por su parte, la Fiscalía de Jalisco emitió una tarjeta informativa en la que aseguró que ya se están realizando las diligencias para identificar a los responsables, aunque señaló que hasta el momento no existen indicios de que el ataque esté vinculado a la labor de María del Carmen como madre buscadora.
La muerte de activistas y madres buscadoras se ha convertido en un doloroso reflejo de la violencia que rodea a los familiares de personas desaparecidas en México. Aunque muchos de estos casos terminan sin resolverse, colectivos como Guerreros Buscadores continúan exigiendo verdad, justicia y seguridad para quienes, incluso en el dolor, no dejan de buscar a sus seres queridos.
Este caso pone nuevamente en el centro del debate la necesidad urgente de proteger a quienes se enfrentan a la impunidad desde las trincheras del activismo social y la búsqueda de justicia.