Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, arremetió contra la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, después de que esta hiciera una defensa del “viejo régimen” durante su informe de labores. En una conferencia matutina desde Palacio Nacional, Sheinbaum defendió la reforma al Poder Judicial que ha sido fuertemente criticada por Piña, asegurando que la iniciativa de su gobierno busca otorgar más autonomía a los juzgadores, al permitir que sean elegidos directamente por el pueblo.
“Lo que estamos haciendo con esta reforma es fortalecer la autonomía del Poder Judicial, no restársela como dicen algunos detractores y la misma ministra Piña. Ahora, los jueces serán elegidos por el pueblo, lo que refuerza su independencia”, dijo Sheinbaum, aclarando que la reforma busca terminar con el control que, según ella, existía bajo el sistema anterior.
La mandataria explicó que el cambio propuesto no busca que el Poder Ejecutivo controle a la Corte, y aseveró que si ese hubiera sido el objetivo, se habría seguido el modelo implementado durante la presidencia de Ernesto Zedillo, que, según Sheinbaum, consolidó un sistema de control del Poder Judicial. En su lugar, destacó, la reforma es parte de un proyecto de transformación, en contraposición a lo que describió como el “viejo régimen de corrupción y privilegios” que defendió Piña.
“Lo que defendió la ministra Piña en su informe es el viejo régimen. Es falso que haya amenazas, y lo que realmente está en juego es la transparencia en el actuar de los jueces. La Ley de Amparo no debe ser utilizada para liberar a delincuentes, y los jueces deben ser los primeros en cumplir con la Constitución”, enfatizó Sheinbaum.
La presidenta también negó que ella o el presidente Andrés Manuel López Obrador hayan amenazado a miembros del Poder Judicial. En su lugar, subrayó que lo que se busca es mayor transparencia en las decisiones judiciales, y en ese sentido, cuestionó la defensa de la ministra Piña hacia la falta de transparencia dentro del Poder Judicial.
“Lo que hemos hecho es hacer públicas algunas decisiones en casos donde se otorgaron amparos a delincuentes, especialmente de la delincuencia organizada, o donde la Corte se demoró meses en resolver, lo que parece responder más a intereses personales o mercantiles que a un ejercicio legítimo del poder judicial. El pueblo de México tiene derecho a saber por qué se toman esas decisiones”, señaló Sheinbaum.
En un tono firme, la mandataria afirmó que una parte del Poder Judicial, particularmente algunos ministros, representa el “régimen de corrupción y privilegios” del pasado, y que ahora el proceso de transformación está llegando también al Poder Judicial, gracias a la voluntad popular.
Por otro lado, en su segundo y último informe de labores, Norma Piña reiteró su denuncia de que el Poder Judicial ha sido objeto de ataques, amenazas y desprestigio por parte del Ejecutivo, sobre todo al actuar de manera independiente en casos de alto perfil que han sido sensibles para el gobierno de López Obrador.