Por Juan Pablo Ojeda
En la conferencia matutina de este miércoles, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, abordó las recientes irregularidades detectadas en los procesos de compra de medicamentos del sector salud. La mandataria aseguró que el caso fue identificado a tiempo y no se permitirá la impunidad.
Sheinbaum detalló que no se trató de irregularidades durante la licitación, sino en la fase final de asignación, y confirmó que los responsables directos ya fueron separados de sus cargos. Aunque aclaró que el titular de Biológicos y Reactivos de México (BIRMEX), Iván Jesús Olmos, no está involucrado, enfatizó que si alguna otra persona estuviera implicada, la investigación lo determinaría. “Si hubo alguna implicación de alguien más, lo tiene que determinar la investigación”, subrayó la presidenta.
En cuanto al monto de la irregularidad, Sheinbaum rechazó las versiones que hablaban de 240 mil millones de pesos, precisando que la cifra es considerablemente menor y corresponde solo a una parte del total de la licitación. La mandataria resaltó que la prioridad es garantizar la transparencia en el proceso y dejó claro que no se tolerará la corrupción bajo ninguna circunstancia.
Sheinbaum también destacó el trabajo de Eduardo Clark y Raquel Buenrostro, quienes, al detectar el problema de inmediato, intervinieron para evitar que la situación se agravara. Aseguró que la pronta acción de ambos permitió frenar la irregularidad a tiempo. “Lo importante es que se previó, afortunadamente, porque se detectó a tiempo”, agregó.
Al ser cuestionada sobre la dificultad de combatir la corrupción en la administración pública, la presidenta afirmó que lo fundamental es tener la voluntad para hacerlo. Aseguró que las personas seleccionadas para ocupar cargos en su gobierno son elegidas por su historia de honestidad, su conocimiento en el área y su convicción con el proyecto. “Lo importante es detectar a tiempo cualquier irregularidad, y si se comete, que haya sanciones administrativas o penales”, concluyó Sheinbaum.
El caso salió a la luz luego de que el subsecretario de salud reconociera «posibles indicios de corrupción» en la adjudicación de 175 claves de medicamentos a un sobreprecio cercano a los 13 mil millones de pesos. En respuesta, el proceso fue pausado para permitir el inicio de las investigaciones correspondientes.