CDMX a 22 de abril, 2024.- Ante la creciente preocupación por las olas de calor y las sequías prolongadas que afectan a México, el presidente de la Comisión de la Reforma Agraria del Senado, Ángel García Yáñez, ha propuesto medidas urgentes para apoyar a los productores agrícolas del país. En un reciente punto de acuerdo, García Yáñez solicitó a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, junto con las secretarías de Desarrollo Agropecuario estatales, la implementación de apoyos económicos emergentes para evitar la pérdida de cultivos esenciales como el maíz, que es vital no solo para la economía sino para la cultura y la alimentación en México.
La ola de calor actual y las sequías han devastado amplias zonas agrícolas, afectando especialmente a 20,000 hectáreas en el estado de Morelos, según reportes del legislador. Esta situación ha puesto en riesgo el ciclo agrícola 2024-2025, amenazando la seguridad alimentaria y elevando los costos de los alimentos básicos para las familias mexicanas.
En respuesta a estas amenazas climáticas, García Yáñez también ha pedido a la Comisión Nacional del Agua que diseñe políticas públicas efectivas para mitigar el impacto de las sequías. Estas medidas incluirían estrategias de gestión de agua y la implementación de tecnologías agrícolas más resilientes al cambio climático.
El senador destacó que los campesinos mexicanos enfrentan múltiples desafíos, incluyendo plagas y eventos climáticos extremos que complican la producción agrícola. Subrayó la necesidad de una acción coordinada entre las autoridades federales y locales para proporcionar los recursos necesarios que permitan a los agricultores superar estas adversidades.
El maíz, el cultivo más afectado, representa una parte significativa del gasto familiar en alimentos en México, con un consumo per cápita de 196.4 kilogramos. La pérdida de este y otros cultivos no solo afectaría la economía agrícola sino que también podría causar un aumento en los precios de los alimentos, impactando directamente en el bienestar económico de millones de mexicanos.
El punto de acuerdo, registrado en la Gaceta Parlamentaria el 17 de abril, está actualmente en revisión por la Comisión de Gobernación. Si se aprueba, podría marcar un paso significativo hacia la adaptación del sector agrícola mexicano a las realidades del cambio climático, asegurando la continuidad y el desarrollo del campo en condiciones adversas.