CDMX a 5 de octubre, 2022.- Los senadores mexicanos dieron luz verde a la iniciativa impulsada desde el PRI para que las Fuerzas Armadas en el país sigan en labores de seguridad pública hasta 2028.
Con 87 votos a favor y 40 en contra, el Senado de México aprobó el dictamen que extiende el plazo de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública en el país hasta el 2028.
La iniciativa, impulsada por una fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI), generó un extenso debate que duró semanas en el Congreso mexicano, que previamente había rechazado la propuesta, pero tras algunas modificaciones fue aceptada por la Cámara Alta mexicana.
Colectivos de víctimas de la inseguridad en el país, así como organizaciones no gubernamentales advirtieron sobre los peligros a los derechos humanos que podría acarrear el hecho de que las Fuerzas Armadas estén en las calles.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez el cual ha representado a los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en septiembre de 2014 lamentó la decisión del Congreso mexicano.
«Se ha impuesto una política de seguridad militarizada de alcance transexenal, sin controles civiles robustos: se presenta como principal control parlamentario una Comisión Bicamaral que en realidad ya existe y ha sido inefectiva como contrapeso», escribió la ONG en sus redes sociales.
En tanto, integrantes del partido Morena, creado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, señalan que la presencia de militares en tareas de seguridad es necesaria para lograr la pacificación del país ante la presencia del crimen organizado.
Gobernadores y legisladores afines al Gobierno de López Obrador aplaudieron la aprobación del dictamen que será remitido a la Cámara de Diputados, la de origen de la iniciativa promovida por Yolanda De la Torre Valdez.
Los argumentos dados por la promovente para que las Fuerzas Armadas permanezcan en las calles del territorio mexicano señalan que «México enfrenta una grave crisis de seguridad, generada principalmente por un patrón de violencia sistemática que a diario se vive en el territorio nacional».
«De la gran inseguridad que genera la violencia, toda la sociedad es víctima», sentencia el documento que fue promovido desde los primeros días de septiembre.
Para combatir los altos índices de inseguridad se propuso la coordinación entre las autoridades y «una atención en varias dimensiones», entre ellas, formar una policía fuerte y sólida que brinde protección a todo el país.
«Un cuerpo policial sólido y efectivo no se construye de la noche a la mañana, implica procesos largos y complejos, más aún cuando se requiere enfrentar al crimen organizado», dijo.
Por ello, la diputada De la Torre sentenció que los cinco años que se dieron a la Guardia Nacional para consolidarse no son suficientes y propuso ampliar a nueve años la presencia de los militares en tareas de seguridad.